A través de una carta, representantes del Comité Permanente de la Conferencia Episcopal de Chile manifiestan que esperan ir recuperando, apenas sea posible, la fe compartida en ceremonias presenciales y reiteran el llamado a cuidarnos y a respetar responsablemente las decisiones de la autoridad sanitaria: “la vida es sagrada, por eso cuidarla es nuestra mayor preocupación en este y todo tiempo”.