COMENTARIOS de CINE

Alis

Expedición al alma de un grupo de niñitas abandonadas y recogidas en las calles de Bogotá.

Documental que emociona desde las primeras entrevistas. Comprueba la pureza, el vacío y el dolor silencioso en el corazón de esas muchachas.

¿Cómo se proyecta el destino cuando se nace sin oportunidades? 

Los realizadores Nicolas van Hemelryck y Claire Weiskopf quisieron hallar la respuesta filmando durante 5 años el proceso de rehabilitación en Arcadia, la casa de acogida para ellas en Colombia.

Sometieron a las niñas a un juego de fantasía. Las invitaron a imaginar que llegaba una nueva compañera llamada Alis. Tiene 15 años y posee un camarote y casillero vacíos. Cada niña debía suponer cómo era esa nueva habitante: su cuerpo, su rostro, su pelo, su voz, su carácter y su historia. 

Sentadas, mirando de frente a la cámara, cada una visualiza en su mente a la recién llegada. Aunque para todas será distinta, gradualmente irán proyectando en Alis sus propias historias, penurias, sueños, ideales, posibles amores e ilusiones.

Ninguna habría podido narrar su propio drama. El trauma las habría enceguecido o avergonzado. En cambio, al atribuírselo a la nueva compañera, se destapa la fuente de sus propias realidades.

Milagroso experimento para ingresar al alma de seres todavía incontaminados y rescatables. 

Se salvan por la FE y la IMAGINACIÓN. Fe en que Alis “existe”; Imaginación como un lugar para ser, por fin, felices y diferentes.

Proyectan en ella su ideal de vida amorosa. Humor inocente al referirse al sexo. Incluso para algunas al lesbianismo surge como lo más cercano al Buen Amor en soledad.

Desde el candor de sus afectos, ¿qué visión de mundo pueden tener esas niñitas siendo víctimas del machismo de parientes violadores, y testigos de homicidios familiares? Ni sus padres las reconocían cuando estaban drogados. La Muerte era como su amiga porque terminaba con los sufrimientos.

Al mirarse el rostro les preguntan: “¿Qué ves de Alis en ese espejo?”. “Ansias de vivir, de libertad e independencia”. 

En Arcadia les nació la idea de futuro, terminar de estudiar, salir adelante; ser ELLAS MISMAS y, lograr un real sentido de FAMILIA. 

Ahora Alis vive en el corazón de cada una. “Queríamos que la película mirara a los ojos” nos dice Nicolás van Hemelryck, y así nos perfora el corazón.  

Con todas sus diferencias terminamos amando a cada una de ellas. Sobrecoge sin recurrir a efectismos. 

22 premios, 14 nominaciones.

APROXIMACIÓN PRODIGIOSA AL ALMA HUMANA EN SU ESTADO MÁS PRIMITIVO. ABSOLUTAMENTE RECOMENDABLE.