"Fue un gran don de Dios a su Iglesia", afirma Obispo prelado de Calama

"Fue un gran don de Dios a su Iglesia", afirma Obispo prelado de Calama

 
Domingo 03 de Abril de 2005
"Nos sentimos huérfanos y en deuda pero también agradecidos, porque la vida entera de Juan Pablo II fue gastada en favor de todos los hombres", sostuvo el Obispo prelado de Calama, Mons. Guillermo Vera Soto.

En un Mensaje a los fieles de la Prelatura, en relación al deceso del Santo Padre, Mons Vera afirma que el Pontífice fue un gran don de Dios a su Iglesia.

Agregó que su visita a Chile nos trajo esperanza, su presencia nos hizo sentir al Señor muy cerca, despertó en nosotros sentimientos de fraternidad, de cercanía...vino a sanarnos y sus palabras calaron hondo, fueron el punto de partida de nuestra reconciliación.

"El Papa ha muerto. El Papa ha muerto cosido a la Cruz, y desde ella en este último tiempo, especialmente, nos ha mirado y bendecido con el dolor, la asfixia y la angustia reflejadas en su rostro, en sus gestos,...el Papa no ha querido escondernos el valor infinito de la Cruz vivida por Jesús, en Jesús y con Jesús", expresa Mons. Guillermo Vera.

Junto con elevar oraciones por su eterno descanso, el Obispo invitó a participar en la Eucaristía Funebre por Su Santidad que se celebrará este lunes a las 20:00 horas en el Templo Catedral San Juan Bautista de Calama.

Ver texto del Mensaje
Calama, 03-04-2005