Respondiendo a la invitación de la Secretaría del Sínodo, la diócesis de Copiapó celebró una misa para encomendar el Sínodo de la Sinodalidad a la Santísima Virgen, este viernes 2 de junio, en el Santuario de Nuestra Señora de La Candelaria.

La misa se ofició el último día del retiro anual del presbiterio, y fue presidida por el obispo diocesano, Monseñor Ricardo Morales, junto al predicador del retiro, el obispo de San Felipe, Monseñor Gonzalo Bravo, los sacerdotes de la diócesis, además numerosas religiosas, laicas y laicos reunidos en el templo mariano.

En su homilía, don Ricardo destacó el camino sinodal que ha llevado adelante la diócesis desde el inicio del proceso, en octubre de 2021. “Todos nos hemos sentido partícipes en lo que ha significado la reflexión preparatoria al Sínodo, con la sintonía que da el Espíritu Santo” aseguró. Destacó que en la etapa continental de preparación al Sínodo fue posible descubrir que otras Iglesias “estaban pensando y soñando lo mismo que nosotros; el Espíritu ha suscitado intuiciones muy hermosas”

Participantes del Sínodo
El obispo relevó la importancia de celebrar en el Santuario dedicado a María Candelaria, porque “en la casa de la Mamá todos tenemos espacio, siempre hay lugar en la mesa”. También destacó la incorporación de setenta hombres y mujeres laicos a este Sínodo, con voz y voto, de acuerdo con la voluntad del Papa Francisco. “Podríamos preguntarnos si debiéramos decir ahora: ‘padres y madres sinodales’” y llamó a rezar por ellas y ellos, “para que el Espíritu descienda y nos muestre los caminos que debemos recorrer como Iglesia, en comunión y fraternidad”.

Por último, llamó a hacerse cargo de la realidad humana, como lo hizo María. “No seamos una Iglesia ajena al sufrimiento humano” y recordó que “nuestra fe no es adhesión a un dogma, a una verdad jurídica o a una moral; es adhesión a Alguien, a Jesucristo”, y concluyó pidiendo “que el Señor nos ayude a profundizar este camino que hemos hecho como diócesis”.

En el ofertorio, se llevó al altar el informe sinodal diocesano, producto del trabajo de la diócesis, junto al pan, uvas, y vino.

Tras la misa, la hermana Sandra Segovia, que fue parte del equipo diocesano para el Sínodo, recordó cómo, al finalizar el informe, el equipo redactor lo llevó a los pies de La Candelaria. “Recordé el momento en que se terminó el informe de la diócesis, antes de ser enviado; recuerdo con mucho cariño y gratitud ese momento, la sencillez del equipo de haber ido, junto a nuestro pastor, a ofrecerle la reflexión de la diócesis a Ella. Fue muy íntimo y bonito ese momento”. También dijo que “somos parte de una iglesia grande, que tiene muchos rostros” y destacó el desafío de “seguir caminando en sinodalidad desde donde cada uno está. Creo que esa es la manera de seguir preparando el sínodo”.

El Sínodo de los obispos sobre sinodalidad se realizará en Roma en octubre de este año y en octubre de 2024, convocado por el Papa Francisco.

Fuente: Comunicaciones Copiapó
Copiapó, 03-06-2023