Delegación chilena marca presencia en el sur de Alemania

Jornada Mundial de Jóvenes:

Delegación chilena marca presencia en el sur de Alemania

 
Viernes 12 de Agosto de 2005
Entonando la canción nacional y con gritos como el “cehacheí”, los jóvenes chilenos celebraron los días previos a la Jornada Mundial de la Juventud vividos en la Arquidiócesis de Friburgo.

Los gritos y vítores de cientos jóvenes chilenos se escucharon luego de una liturgia ecuménica realizada en la Iglesia del Espíritu Santo en pleno corazón de Heidelberg. De esta manera, la delegación de nuestro país mostró su presencia en la Arquidiócesis de Friburgo. La ceremonia fue la culminación de un enriquecedor día en el que compartieron con familias alemanas alrededor de una mesa y luego con jóvenes venidos de Francia, Panamá y Ruanda en la ceremonia en la que participaron católicos y luteranos.

Durante la liturgia, cada uno de los muchachos rezaron el Padre Nuestro en su propio idioma; en el templo resonaban voces en francés, alemán y español, pero con un mismo espíritu y relacionándose con un mismo Señor. Previamente, gran cantidad de sacerdotes católicos presentes se acercaron a los jóvenes con agua bendita para hacerles la señal de la cruz en sus frentes y así renovar su bautismo.

Al término de ella, el Padre Galo Fernández, Vicario de la Esperanza Joven, manifestó que “los chilenos en Alemania han estampado una presencia llena de entusiasmo. Hemos participado en una liturgia ecuménica que marca el espíritu de este tipo de encuentros, llenos de comunión. Heidelberg tiene una historia dolorosa por la división de los cristianos, sin embargo ahora tiene un encuentro fraterno”. Consultado respecto al recibimiento de los alemanes, como anfitriones de esta XX Jornada Mundial de la Juventud, el Padre Galo dijo, “he visitado varios lugares y siempre he escuchado buenas palabras sobre la acogida de los alemanes. Hemos estado sorprendidos por la delicadeza, el cariño y el buen humor de ellos hacia nosotros”.

Los jóvenes chilenos respondieron emocionados a la experiencia de encontrarse con una Iglesia multicultural en la ciudad alemana de Heidelberg con un fuerte y entusiasta “cehacheí”.

Fuente: Comunicaciones Colonia 2005
Heildeberg, 12-08-2005