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INSTRUCTIVO PARA PROFUNDIZAR LA REFLEXIÓN
CON LOS ARTÍCULOS DEL CREDO

Contexto:

- Día del catequista sábado 11 de mayo 2013. Vísperas de la Ascensión del señor.
- Año de la fe: Oportunidad para profundizar en los contenidos esenciales del Credo.

Objetivo:

- Favorecer la profundización de los artículos del Credo brevemente comentados, de modo
que, los catequistas en sus diócesis, a nivel personal o en encuentros comunitarios, puedan
interiorizarse de lo fundamental de la fe y dar razón de su esperanza (1 Ped. 3,15).

Fuentes:

You Cat
"Esta es nuestra fe" P. Mario Borello

Temas del Credo:

1. Creo en Dios, Padre todopoderoso
2. Creador del cielo y de la tierra
3. Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor, que:
4. Fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo
5. Nació de Santa María Virgen
6. Padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, descendió a
los infiernos
7. Al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha
de Dios, Padre todopoderoso
8. Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos
9. Creo en el Espíritu Santo.
10. Creo en la santa Iglesia católica, creo en la comunión de los santos.
11. Creo en el perdón de los pecados.
12. Creo en la resurrección de la carne.
13. Creo en la vida eterna.

Propuesta para su uso:

El Coordinador(a) diocesano o parroquial de Catequesis convoca a los catequistas para
celebrar el Día del Catequista en el Año de la Fe. La ocasión es propicia para que como
catequistas, según la sugerencia del Papa, renovemos y profundicemos lo esencial de nuestra fe
por medio de la meditación del Credo.

Materiales:

Copias del Credo Apostólico para cada participante, lápices, copias de las reflexiones de los
artículos del Credo que aparecen en este Especial Web.

Sugerencias para el encuentro:

  1. Iniciar con una breve oración.

  2. Motivación:

    Desde los orígenes la Iglesia expresa lo nuclear de su fe en fórmulas breves y claras de fácil
    retención en la memoria.

    El Credo que rezamos hoy es el llamado apostólico porque es el resumen fiel de la fe de los
    apóstoles; su formulación definitiva data del siglo II o III.

    La recitación del Credo en la liturgia de la misa dominical, después de la homilía, se introdujo
    paulatinamente hasta que en el siglo XII ya era habitual. Actualmente, lo recitamos en las misas de los domingos y solemnidades.

    ¿Entendemos hoy los creyentes lo mismo que nuestros antepasados cuando escuchan y repiten que Dios ha creado el cielo y la tierra, que Jesús descendió a los infiernos y luego subió a los cielos, que la carne va a resucitar? ¿De qué cielos, de qué tierra, de qué infiernos, de qué carne se trata?

    En este año, en el que se nos invita a un Año de la Fe, la Iglesia nos convida a entender mejor lo que rezamos y en este encuentro lo iremos reflexionando. Esperamos vayamos comprendiendo un poco mejor lo que decimos cada vez que, rezando el Credo, profesamos nuestra de fe en Dios Padre, en su Hijo Jesucristo y en el Espíritu Santo, tanto para beneficio nuestro como para el que prestamos por medio de las catequesis.

  3. Entregar las copias del Credo.

    Les proponemos que cada catequista:

    a.Trabajo personal: subraye aquellos artículos del Credo que le parecen más difíciles
    de entender o con los que tiene algún conflicto en su experiencia de fe.

    b. Trabajo grupal: en grupos o todos juntos (si el número lo permite), comentan su
    trabajo y expresan sus dudas y preguntas.

    c. El Coordinador(a) agrupa a los catequistas de acuerdo al artículo del Credo que
    desean profundizar o tener más claro.

  4. A continuación entrega copias de las reflexiones del Credo a cada grupo según el
    artículo elegido.

    a. Los integrantes del grupo comentan sus dudas.
    b. Leen el comentario al artículo que les fue entregado.
    c. Comentan y preparan una nueva reflexión como síntesis de su trabajo.

  5. Reflexión común.

    El Coordinador(a) invita a un Plenario en el que cada grupo expresa sus comentarios y reflexión acerca del artículo que les tocó trabajar.
    Preguntas para el plenario pueden ser:

    - En que me he sentido enriquecido /a.
    - Que nuevo desafío me plantea.

    El Coordinador(a) aclara dudas o reafirma la reflexión de cada grupo y si se estima, puede
    planificar otros encuentros similares para profundizar, los artículos del Credo.

  6. Finaliza el encuentro con una Oración y recen el Credo.