Comunidad Antofagastina festejó a sus 25 diáconos permanentes con una Eucaristía en la catedral.
25 Diáconos permanentes de la Arquidiócesis de Antofagasta celebraron junto a los feligreses y a sus familiares en la Catedral el día de su santo patrono. Ocasión en que presidió la Eucaristía Benedicto Arredondo Rodríguez, Vicario General.
“Es innegable que han sido un regalo de Dios para nuestra Iglesia particular, en un largo período de tiempo cuando había muy poco clero, ellos con generosidad, sacrificio y entrega asumieron grandes responsabilidades, algunos de ellos estuvieron a cargo de parroquias, capillas, comunidades de base y tareas apostólicas”, enfatizó el presbítero Sergio Neira Chancay, Vicario de Pastoral, en su homilía.
“Si tuviéramos que enumerar las diversas tareas y servicios pastorales que realizan, nos faltaría tiempo para decir todo el bien que hacen, gracias por lo que son, por lo que hacen, cuenten siempre con nuestro reconocimiento, oración y gratitud. Felicidades por estos 50 años del diaconado permanente en Chile, los ponemos bajo el amparo de la Virgen Madre, que se hizo la esclava del Señor; para que Ella siempre los proteja, los acompañe y los acerque al corazón de su Divino Hijo”, expresó el Vicario Pastoral.
Además agregó y les recordó que su primer servicio está con su familia, su esposa e hijos, con ellos tiene que santificarse, y con ellos desarrollar su diaconía en la comunidad.
En el mismo contexto Jaime Venegas, coordinador de los diáconos mencionó: “Es una bendición el hecho de que ya se cumplan 50 años de la instauración del diaconado en Chile, nos formaron como una familia diaconal, donde se involucra todo nuestro núcleo más cercano, esposa e hijos, no por obligación sino que por una convicción de fe, de servir a los hermanos. También estamos muy agradecidos de la comunidad, el cariño, aprecio y a veces sin buscarlo el reconocimiento y eso nos insta a poder seguir en esto, de haber sentido el llamado y de haber dicho que sí”.
Cabe recordar que los diáconos son servidores, que mantienen la fe en las comunidades aisladas y están para fortalecer la vida espiritual en las grandes ciudades, donde existe la escasez de sacerdotes, pero al mismo tiempo enriquecen el apostolado y por supuesto,es el caso en esta Iglesia nortina.
Fuente: Comunicaciones Antofagasta
Antofagasta, 11-08-2017