El Papa Francisco envió un mensaje para Nicol, interna de la cárcel de Coyhaique, quien hace un año le escribió a su Santidad pidiendo oración por ella y por todas las personas que se encuentran privadas de libertad.
Este miércoles 27 de julio, Luis Infanti de La Mora, Obispo Vicario de Aysén en compañía del Capellán de las cárceles de Aysén, Padre José Barría, se trasladaron hasta la cárcel de Coyhaique para hacer entrega de una carta de respuesta enviada por el Papa Francisco a Nicol, joven madre que se encuentra recluida en el penal.
Nicol, comenta que ella envió dos cartas al Papa Francisco y fue en la segunda, que él respondió, agregando:
“cuando vino el Nuncio le contamos que le habíamos escrito una carta y nos dijo que le escribamos otra y que él la iba a llevar personalmente, entonces ahí le escribí otra carta, expresándole todo, cómo estaba acá, cómo vivía, qué sentía, mi condena y hartas cosas, que rece harto por mí y por las personas que vivían acá conmigo.”
Por otra parte, Nicol se sorprendió bastante al enterarse que su segunda carta había sido respondida por el Santo Padre, mencionando:
“no pensé que me iba a responder, porque como me habían dicho que le escriba, había pasado harto tiempo y después cuando vino el Padre no le creía mucho, pero me dijo “no si es verdad”. Ahora me gustaría contarle que tengo mi familia, que me casé, que tengo una niñita de dos meses.”
Monseñor Infanti, comenta que esta no sólo es una carta personal hacia Nicol, sino que es un mensaje para todos y todas quienes se encuentren recluidas en estas dependencias y en otras, diciendo:
“es una carta de aliento a tener fortaleza, confianza, valentía y esperanza, aun estando en la cárcel, ya que no es un lugar donde se pierda la esperanza, sino que es un momento en que se pueden fortalecer los proyectos de vida para una sociedad más justa y más fraterna y sentimos que la falta de libertad en una cárcel, no quiere decir falta de dignidad, de valor, de confianza, en que las personas podemos recuperar y vencer nuestras equivocaciones, nuestros errores y proyectar nuestra vida de manera más grata para nuestra sociedad.”
Al finalizar la visita, las internas de la cárcel, prepararon un desayuno para compartir junto al Padre Obispo, el Capellán y el cuerpo de Gendarmería del recinto.
Fuente: Comunicaciones Aysén
Coyhaique, 27-07-2016