“Recibir esta distinción es una osadía mía, pero lo hago feliz, al representar a tanta gente buena y colaboradora con que he sido favorecido en esto onces años entre ustedes”, expreso durante su discurso Mons. Pablo Lizama Riquelme, al recibir la distinción de Hijo Ilustre de Antofagasta.
El Consejo Municipal determinó por unanimidad el reconocimiento para Mons. Lizama y así lo indica el Decreto N° 191 / 2016, que fue leído por el secretario municipal, donde se señala que el nombramiento se debe al reconocimiento que la comunidad antofagastina hace en la persona del Arzobispo, por su dedicada labor en bien de los más vulnerables de nuestra zona, por su incansable preocupación por cuidar la vida espiritual de quienes viven en campamentos, creando las parroquias personales; y por contribuir y apoyar siempre acciones en bien del crecimiento tanto espiritual como comunitario de la ciudad.
También, durante la ceremonia, la alcaldesa Karen Rojo agradeció la labor del Arzobispo de Antofagasta, principalmente por su constante interés en invitar a las autoridades a trabajar siempre unidas por el bien de la comuna y destacó el gran trabajo que realizó para restaurar el campanario de la Catedral, para lo cual reunió distintas autoridades, empresarios y ciudadanos, con el fin de lograr dicho propósito.
El Arzobispo de Antofagasta, además, señaló con motivo de esta condecoración: “Llegué como miles de personas migrantes, ya sean chilenos o de otros países. Unos buscando paz, otros un futuro mejor para sus familias. Por mi parte, era y es el interés de anunciar el Evangelio de Jesús a los que viven en este lugar del mundo (…). Conciudadanos, recordaré ante el Señor, en mi oración, a todos ustedes que han hecho posible esta magnífica ceremonia. Recordaré con especial afecto las auroras en el desierto, como también los atardeceres y puestas del sol en nuestro mar. La belleza del desierto, pero sobre todo a ustedes, a los casi medio millón de hermanos que viven en estas tierras”.
La ceremonia se desarrolló en el salón de honor del municipio, con la presencia de autoridades nacionales, regionales y municipales, donde además fue galardonado el Colegio San Luis de la Compañía de Jesús, con el Ancla de Oro, y la distinción póstuma de Hijo Ilustre a Antonio "Tonko" Obilinovic, quien fue un destacado deportista, docente y comentarista deportivo antofagastino.
Fuente: Comunicaciones Arzobispado de Antofagasta
Antofagasta, 15-02-2016