La familia en los tiempos modernos, ha sufrido quizá como ninguna otra institución, la acometida de las transformaciones amplias, profundas y rápidas de la sociedad y de la cultura. Muchas familias viven esta situación permaneciendo fieles a los valores que constituyen el fundamento de la institución familiar. Otras se sienten inciertas y desanimadas de cara a su cometido, e incluso en estado de duda o de ignorancia respecto al significado último y a la verdad de la vida conyugal y familiar. Otras, en fin, a causa de diferentes situaciones de injusticia se ven impedidas para realizar sus derechos fundamentales.
Los desafíos actuales derivados del individualismo y una concepción de la libertad desarraigado de la responsabilidad no están siendo enfrentados desde una visión que considere la igual dignidad de la mujer y el varón, el valor de la complementariedad en la diversidad de los sexos, ni menos la dignidad de la vida humana desde la concepción, lo cual genera uniones débiles, falsos compromisos efímeros y uso de métodos de control de natalidad que replican antiguos y nuevos modelos de injusticia social en las nuevas generaciones.
La comunidad debe reconocer que el bien social, pasa por el bien de cada uno sus integrantes, que cada persona es un bien en sí mismo y por lo tanto también un “capital humano” al servicio del bien común. Cada familia es la “célula básica” de la sociedad y por lo tanto un “capital social” que debe ser valorado como patrimonio de la humanidad.
La solidaridad intergeneracional y la subsidiaridad deben ser el fundamento de una nueva educación que sirva a las próximas generaciones a reconocer y valorar a la familia como institución anterior al Estado y como lugar privilegiado para la llegada y formación de los hijos. Estamos no sólo ante, sino necesariamente en medio de este conflicto: todos nos vemos implicados y obligados a participar, con la responsabilidad ineludible de elegir incondicionalmente en favor de la vida y la familia.
Dr. Cristián Vargas Manríquez
Director Instituto Superior de Bioética
Universidad Católica de la Santísima Concepción