La comisión de constitución de la cámara de diputados debe votar el articulado de la ley abortista del gobierno de izquierda de la Nueva Mayoría. Es de esperar que los legisladores respeten la Constitución política, los dictámenes del Tribunal Constitucional, la Corte Suprema y toda la legislación internacional que obliga a Chile en la defensa de la vida por nacer, asegurando el más fundamental de los derechos humanos.
De igual modo, no perdemos la esperanza que los diputados de la DC proclives al aborto y a la izquierda dura, puedan rechazar el proyecto pues contradice radicalmente su declaración de principios. Y de la centro derecha liberal con Evopoli a la cabeza, poco y nada se puede esperar en la defensa de los derechos humanos.
Así, el “ajuste fiscal” aun cuando la presidenta Bachelet diga que "no se hará a costa de las familias", si lo es porque no dispone de los recursos económicos para el acompañamiento de la mujer/madre embarazada en las situaciones de riesgo del proyecto abortista. Y se opta por la solución más barata y de menor compromiso para el estado: el aborto. Entonces, la tan bullada ley de inclusión y el lobby de los derechos reproductivos, someterá a la tómbola de la muerte a los niños de Chile que tienen derecho a nacer. Ellos son los más débiles, los más pobres. Los que no tienen voz. Sin embargo, para ONU-mujeres y el gobierno de la NM deben ser eliminados. La paradoja de un gobierno de izquierda que se dice defensor de los derechos humanos.
P. Fco. Javier Astaburuaga Ossa
Director Proyecto Nasciturus en defensa de la vida