Falleció P. Valeriano Casado, de la congregación del Verbo Divino en Osorno
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Una de las últimas fotografías del P. Valeriano junto al párroco de “Nuestra Señora de Lourdes” P. Casimiro Martínez
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En la madrugada del jueves 16 de octubre, a la edad de 83 años, confortado por los últimos sacramentos, se apagaba la vida del Padre Valeriano Casado Noguerol, de la Congregación del Verbo Divino, en la parroquia “Nuestra Señora de Lourdes” en la diócesis de Osorno.
Las exequias del padre Valeriano se realizarán el sábado18 de octubre en su querida comunidad de “Nuestra Señora de Lourdes” a las 10:00 hrs. Luego será trasladado al Cementerio Católico de Osorno.
Nació el 15 de diciembre de1925 en Castilla, España. Ingresó al Seminario Menor Diocesano para seguir su vocación por la vida sacerdotal, en 1938, a la edad de 13 años, en plena guerra civil española. Fue ordenado sacerdote el 6 de junio de 1950 y su primera destinación fue como capellán en un colegio.
A pesar de llevar una vida sencilla le inquietaba el deseo de servir en las misiones, y con esa motivación fue aceptado como novicio en 1964 en la Congregación de los Misioneros del Verbo Divino.
Dos años más tarde llegó a Chile y sus superiores lo destinaron a Osorno, a la parroquia “Nuestra Señora de Lourdes” en Rahue Bajo donde sirvió como párroco. Posteriormente fue destinado a la parroquia “Nuestra Señora del Carmen” y tras un breve paso por la comunidad de Rancagua fue enviado a Santiago a la parroquia “Espíritu Santo”. Pero el sur le atraía, así es que volvió a Rahue en 1968 y desde entonces se había mantenido en diversos servicios pastorales en la diócesis de Osorno, entre las parroquias de “Entre Lagos”, “El Carmen” y “Lourdes”.
En junio del año 2000 celebró sus Bodas de Oro sacerdotales en la comunidad de la parroquia “Nuestra Señora del Carmen” en medio del cariño de la gente y la alegría de sus hermanos de Congregación.
Entre sus aficiones estaba la música, siempre estaba aprendiendo la ejecución de algún instrumento y últimamente tomaba clase de flauta traversa. Como organista solía acompañar las celebraciones litúrgicas de la comunidad donde se encontraba. Era un profundo estudioso de las Sagradas Escrituras, del hebreo y del griego. También había descubierto la utilidad del esperanto, lengua internacional que cumplió 100 años de difusión.
Fuente: Comunicaciones Osorno
Osorno, 17-10-2008