Con mucha alegría y y rodeado de fieles el Padre Pedro Caro, Párroco de Isla de Pascua, celebró sus Bodas de Oro sacerdotales en la Parroquia Nuestra Señora del Rosario de Quilpué. El Padre Pedro ingresó al seminario menor a los 12 años.

En ella estuvieron presentes Mons. Gonzalo Duarte, Obispo de Valparaíso; Mons. Santiago Silva, Obispo Auxiliar de Valparaíso; Mons. Javier Prado, Obispo Emérito de Rancagua, sacerdotes, diáconos, seminaristas y religiosas presentes en la diócesis de Valparaíso.

El Padre Pedro Caro ha servido en estos cincuenta años en las parroquias: “El Espíritu Santo” de Valparaíso, “Nuestra Señora del Rosario” de Quilpué, “La Asunción de María” de Peña Blanca, “Nuestra Señora de los Desamparados” de Quillota, “Nuestra Señora del Rosario” de Olmué, “Santa María Madre de la Iglesia” de Quilpué, y “Sagrado Corazón de Jesús” del Cerro Barón.

En su homilía Mons. Duarte recordó que un creyente y más aún un sacerdote está llamado a dar la vida todos los días por sus hermanos. “Jesús se presenta en medio de nosotros como el que sirve, el que da la vida por nosotros. Un sacerdote es llamado por Dios a cumplir una vocación especial que es hacer presente a Jesús en su entrega a todos”. “Toda la vida del sacerdote, debe ser de servicio, imitando la vida de Jesús que es el gran sacerdote de nuestra fe”.

“Estamos contentos de celebrar al P. Pedro y agradecerle tanto bien que ha hecho y hace por esta Diócesis que tanto quiere. También le agradecemos su aporte al presbiterio, por su presencia permanente y su buen humor”, agregó Mons. Duarte.

Al final de la Eucaristía, el Padre Pedro Caro dirigió unas palabras a los asistentes. “Agradezco a todos los que me han acompañado en estos 50 años. A mis padres Pedro y Rosa; a Mons. Rafael Lira Infante, a todos los obispos de la Diócesis de Valparaíso, a mis compañeros de los seminarios en Valparaíso y Santiago. A mi familia. Gracias a Jesús y a su madre”.

Fuente: Comunicaciones de Valparaíso


Quilpué, 20-09-2008