1. Su Santidad Juan Pablo II me ha designado Obispo Coadjutor de Rancagua para colaborar íntima y estrechamente con el Pastor Diocesano de esa querida Iglesia Diocesana Monseñor Javier Prado Aránguiz.
Para él mi saludo fraterno y mi adhesión total a su ministerio pastoral de unidad y comunión.
2. Saludo de hermano al Clero de Rancagua, presbíteros y diáconos permanentes; a las religiosas y religiosos de las diferentes Congregaciones; a los jóvenes seminaristas, a todos los fieles de parroquias y comunidades; saludo de paz y esperanza a todos los habitantes de la VI Región, a sus distinguidas autoridades, a todas las organizaciones de la sociedad rancagüina.
3. Desde ya me siento en comunión de amor y de misión a toda la Iglesia Diocesana, y en esta ocasión, al igual que en 1979 cuando iniciaba mi servicio de pastor, quiero expresar: "Con la confianza total en el Señor y en Uds., con humildad y en espíritu de servicio, quiero integrarme a la acción pastoral de esa querida Iglesia. Quiero hacer mías sus inquietudes, sus búsquedas. Quiero compartir sus alegrías y sus sufrimientos. Ustedes me ayudarán a ser Obispo según el corazón de Cristo" († Alejandro Goic K.-8-VII-1979 en Concepción).
4. Ruego a Dios, y pido que me ayuden con sus oraciones, para que en este nuevo servicio eclesial que El me pide, pueda vivirlo con 'fidelidad a Jesucristo y su Evangelio, asumiendo toda la riqueza de la vida eclesial diocesana.
5.-Con gozo, paz y esperanza espero vivir junto a todos ustedes el don de la fe. Son mis nuevos hermanos que el Señor me regala. Con San Agustín repito: "Soy Obispo (coadjutor) para ustedes, soy cristiano con ustedes. La condición de Obispo connota una obligación, la de cristiano un don; la primera comporta un peligro; la segunda una salvación".
¡El Señor les bendiga y les guarde! María su Madre les proteja.
Hasta muy pronto. Les quiere y bendice,
† Alejandro Goic Karmelic
Obispo Coadjutor Electo de Rancagua
Osorno, 10 de julio de 2003.