Santiago, 12 de noviembre de 1999
La situación que afecta al senador don Augusto Pinochet y sus repercusiones en nuestra sociedad han movido a diversos medios de comunicación a solicitar la opinión de los Obispos del país. Por esto, la Oficina de Asuntos Públicos y Prensa de la Conferencia Episcopal de Chile hace presente que, sobre este particular, la Conferencia ha manifestado lo siguiente:
1. La Iglesia anima el compromiso creciente de la comunidad internacional por el respeto de la dignidad de los seres humanos y participa en estos esfuerzos que son, sin duda, un progreso de la humanidad. Para ello, un medio indispensable es el del Derecho, aplicado tanto dentro de cada país como en la relación entro ellos. En este sentido, el Comité Permanente de la Conferencia Episcopal piensa que, mientras no se encuentre en vigencia el Tribunal Penal Internacional, la ambigüedad jurídico existente está provocando, ya en este caso, dificultades entre nuestro país, que siente vulnerada su soberanía, y naciones tradicionalmente amigas.
2. Más allí incluso del modo cómo esto afecta el senador Pinochet, y del problema de relaciones entre Estados que se ha generado, los Pastores ven con dolor el daño que ha sufrido la convivencia social, incluso en la relación con personas que son porte de la comunidad nacional y que provienen, ellos o sus ancestros, de las naciones involucradas. La Iglesia pide a todos que se reflexione con serenidad y se busquen medios de expresar los diversos puntos de viste sin ofender a otras personas ni dañar la convivencia nacional. A los cristianos les recuerdan que el Señor nos dejó el mandato evangélico del amor a todas las personas, sin ninguna exclusión.
3. En relación con las violaciones de los derechos humanos ocurridas en el pasado, los Obispos invitan a todos a crear un clima en que sea posible avanzar en su real superación como obstáculo a la convivencia, recorriendo con respeto mutuo los caminos de la verdad y la justicia que afectan a unos y otros, con el mismo espíritu misericordioso que el Buen Padre Dios nos regala a cada uno y con la misma disposición al perdón que El tiene con sus hijos. Facilitar la labor de la Meta de Diálogo creada por el Ministro de Defensa parece una muy buena oportunidad en este sentido.
4. En ese espíritu, y considerando lo antes señalado, así como las precarias condiciones de salud y la avanzada edad del senador Pinochet, los Pastores estiman que, respecto a su situación en Europa, deben prevalecer las consideraciones humanitarias.
Por encargo del Comité Permanente
ENRIQUE PALET C., diácono
Director Asuntos Públicos y Prensa de la Conferencia Episcopal de Chile