Misa en la Catedral por el eterno descanso de la religiosa, de las Hermanitas de los ancianos desamparados, fallecida inesperadamente este lunes en Colombia.
Con la eucaristía por su eterno descanso, la diócesis de Copiapó dio el último adiós la hermana María del Carmen Rubiano, religiosa de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados.
La religiosa falleció inesperadamente el lunes 4 de noviembre en su natal Colombia, donde se encontraba acompañando a su madre que se encontraba delicada de salud.
La misa fue presidida por el obispo, Mons. Ricardo Morales, quien fue acompañado por sacerdotes de la diócesis que manifestaron así su gratitud por la vida de Sor Carmen, como la llamaban. En la homilía, el obispo invitó a orar por el eterno descanso de la querida religiosa. “Muy joven quiso seguir al Señor -dijo don Ricardo-, en la vocación de servicio a los ancianos, especialmente a los más desvalidos”. El obispo destacó su actitud sencilla y humilde. “En las oportunidades que tuvimos para compartir, nos dimos cuenta de su corazón grande y generoso; siempre trataba de pasar desapercibida, sus propios problemas de salud pasaban a segundo plano”, y agregó que “su personalidad nos permitió reconocer la ternura y el amor de Dios que se refleja en la vocación de las hermanitas”.
“Dios estuvo con nosotros en la presencia de esta religiosa, nos visitó por medio de ella”, señaló don Ricardo, y comentó que estaba en Colombia acompañando a su madre en la última etapa de su vida. “Pudo despedir a su mamá, pero quería volver a Chile; quería morir en Chile, pero Dios dispuso otra cosa. Era voluntad de Él que ella estuviera allá y que su familia y sus cercanos la pudieran despedir”, dijo don Ricardo. El obispo aseguró que “al final se nos va a juzgar por nada más que por el amor con el cual vivimos y desempeñamos nuestra vocación”.
En la Catedral se encontraban las hermanas de la Congregación, personal e incluso algunos usuarios del Hogar de Ancianos, religiosas, funcionarios de la curia y un sinnúmero de fieles que conocieron a Sor María del Carmen y se unieron a la oración en su memoria.
La Hermana María del Carmen nació en Colombia en 1943. Hizo su noviciado y sus votos temporales en Perú. Llegó a Chile en 1962, primero a Temuco, donde hizo sus votos perpetuos en 1965. También estuvo en La Serena y en Argentina.
Llegó a la diócesis de Copiapó el año 1997, a servir en el Hogar de Ancianos Nuestra Señora de La Candelaria.
Fuente: Comunicaciones Copiapó
Copiapó, 07-11-2024