En el marco del Año Jubilar (2000), el Papa San Juan Pablo II declaró beatos a dos Pontífices, Pío IX y Juan XXIII, junto con otros tres servidores del Evangelio: el arzobispo de Génova, Tomás Reggio; el sacerdote diocesano, Guillermo José Chaminade; y el monje benedictino, Columba Marmion.

El Beato Tomás Reggio fundó a las Religiosas de Santa Marta, con la misión de vivir el Evangelio a través de la fe, la acogida y el servicio. Bajo esta misión, las religiosas y todos los integrantes de la Familia de Santa Marta se dedican a actividades pastorales asistenciales, sanitarias, educativas y parroquiales.

En su homilía durante la beatificación, el Papa Juan Pablo II describió a Mons. Tomás Reggio con estas palabras: “Llevad a la práctica la Palabra y no os limitéis a escucharla” (St 1, 22). Estas palabras del apóstol Santiago reflejan la vida y el apostolado de Tomás Reggio, sacerdote y periodista, que fue obispo de Ventimiglia y, luego, arzobispo de Génova. Hombre de fe y cultura, supo guiar a sus fieles en todas las circunstancias, mostrando una profunda sensibilidad ante los sufrimientos y la pobreza de su pueblo, para lo cual organizó una ayuda oportuna en cada situación de necesidad. Precisamente, fundó la familia religiosa de las Religiosas de Santa Marta para ayudar a los pastores de la Iglesia, sobre todo en el ámbito de la caridad y la educación.”

La Familia Religiosa de Santa Marta, presente en Italia, India, El Líbano, El Vaticano, México, Brasil, Argentina y Chile, celebra un nuevo año de la beatificación con un renovado compromiso con el Evangelio.

Juntos, como Familia Religiosa, pedimos al Beato Tomás que interceda frente a Dios para alcanzar la santidad.

Fuente: Comunicaciones Delegación de Santa Marta
Providencia, 03-09-2024