Tres rasgos fundamentales del Catequista destacó el Obispo de Osorno en celebración por el día del Formador de la Fe
Ser un hombre o mujer de la Palabra del Señor, de la Eucaristía y de Misión, fueron las características que resaltó y desarrolló en su mensaje el obispo Carlos Godoy Labraña en su saludo a los Catequistas, durante la celebración de su día que se realizó este sábado 11 de mayo en Casa Betania.
La jornada se inició con un momento de oración, lo que dio paso al compartir fraterno, donde disfrutaron lo que aportó cada comunidad parroquial para agradecer el servicio pastoral de los catequistas, por su compromiso y entrega, donde el coro de la capilla Santa Clara amenizó el momento con música y cantos que invitó a los formadores de la fe, a acompañar en la interpretación de las canciones, aplaudir y bailar.
En la oportunidad, el Vicario General, padre Cristian Cárdenas, dio gracias a Dios “por cada uno de ustedes, por el servicio que prestan en cada una de las parroquias de nuestra Diócesis, por el llamado que les han hecho, por la respuesta que ustedes han dado para poder servir en la Iglesia. Todos somos catequistas, también en nuestra familia, pero a ustedes la Iglesia les confía una tarea muy especial, en la que, a un grupo de personas, niños, jóvenes, adultos, van en la búsqueda de sus sacramentos”.
Explicó que más allá del Sacramento mismo “queremos transmitirle una experiencia de Dios, la experiencia que nosotros hemos tenido, pero también mejorada, una experiencia de encuentro con el Señor. Muchas gracias por todo lo que realizan, que Dios les bendiga, también a sus familias, su vocación y cada una de las personas con las que se van encontrando en el proceso de preparación a los Sacramentos, que el Señor les ayude y la gracia del Espíritu Santo descienda sobre ustedes”.
Inmediatamente después, divididos en tres grupos, los presentes vivieron tres talleres preparados para la ocasión: Dinámicas con música, Risoterapia y teatro, donde por espacio de 40 minutos en cada uno de ellos, rieron, se relajaron, se expresaron, se distendieron, se divirtieron y pasaron un alegre momento junto a las guías de cada uno de dichos espacios.
Al finalizar la jornada, los catequistas en la capilla del lugar, junto con hacer oración y presentar diversos signos al Señor, y dejarlos a los pies del altar, dirigidos por el padre Claudio Fábrega, encargado de la Pastoral de la Catequesis, renovaron su compromiso con el Señor, y el Obispo de Osorno, Carlos Godoy Labraña, realizó el envío y la bendición final.
Mensaje del Pastor de Osorno a los Catequistas
En la ocasión, el obispo Carlos en su saludo a los Catequistas en su día, dio gracias por su servicio en la Iglesia, y resaltó tres rasgos primordiales que debe poseer quienes tienen la misión de educar en la fe; primero, señaló que debe ser una persona “que recibe la Palabra de Jesús en su corazón, que la Palabra ha tocado su corazón, y así uno entiende que, ante todo, la catequesis es fruto de una experiencia de comunión con Jesús”.
“Ustedes están convencidos de la Palabra de Jesucristo, y por ello justamente es que la comparten con otros hermanos. Es por eso que el nuevo Directorio de la Catequesis (2016), señala que el catequista ante todo catequiza con su vida, con su testimonio, su adhesión a Jesucristo, el Señor”, enfatizó.
El segundo rasgo “es que el catequista es el hombre o mujer de la Eucaristía. Es evidente que el catequista debiese tener una relación profunda con la eucaristía, y esto que parece un poco obvio, no lo es tanto y la experiencia nos dice que no siempre uno se encuentra a catequistas que tienen una relación estrecha con la eucaristía”, señaló el obispo.
Por último, enfatizó que el tercer rasgo “ineludible en la vida del catequista, es que debe ser un hombre o una mujer de la Misión. Por eso es que el Día del Catequista está asociado a la fiesta de la Ascensión del Señor, porque es la fiesta de la Misión. Es decir, Jesús asciende, no para que sus discípulos se queden sentados tranquilamente, sino para enviarlos: ´Vayan por todo el mundo y anuncien el Evangelio´. El catequista es el que anuncia el Evangelio con su vida, pero también con su palabra”.
“Son tres rasgos que ojalá podamos potenciarlos lo mejor y lo más posible en nuestra vida, y ojalá en la vida de nuestra comunidad cristiana, y que ustedes también sean impulsores de esos tres rasgos, que puedan contagiar también incluso a sus sacerdotes, nosotros también necesitamos ser catequizados porque la catequesis es permanente. El primer anuncio es un anuncio que debe ir renovándose constantemente”, añadió.
Fuente: Comunicaciones Osorno
Osorno, 12-05-2024