Monseñor Ramos recordó que esta celebración es la primera que se realiza con normalidad luego de la pandemia, ya que años anteriores se había realizado de forma especial.

Además, durante la Misa el arzobispo subrayó que uno de los elementos importantes que debiera caracterizar a un sacerdote y lo que nos exige el tiempo presente es el saber escuchar, entendiendo desde el corazón lo que estamos oyendo. “Si uno escucha la persona se siente apoyada en medio del dolor o de la soledad”.

También otro elemento importante es saber acompañar, “una de las cosas que hemos aprendido con la pandemia es que si nos aislamos y si no tenemos contacto con los demás se abre una puerta al individualismo. “Una de las crisis de ello, por ejemplo, es la violencia que hemos visto en los colegios debido al encierro en las casas, sin sociabilizar con sus pares”.

El Arzobispo explicó que la vocación basada en el llamado del Señor es para servir a los demás a través del sacerdocio, teniendo siempre presente a Jesús.

Luego de la homilía los sacerdotes renovaron con fe y esperanza sus compromisos sacerdotales frente a la comunidad. Durante la misa, el obispo Ramos consagró el Santo Crisma y bendijo los óleos de los catecúmenos y de los enfermos.

Fuente: Comunicaciones P.Montt
Puerto Montt, 14-04-2022