Diócesis de Copiapó lamenta fallecimiento del p. Juan Sanchís Ferreiro
Sacerdote valenciano fue misionero en Chile durante 21 años.
Este lunes 31 en la mañana, se nos ha informado del fallecimiento del P. Juan Sanchis Ferreiro, en Valencia. Sus funerales serán hoy en Piles-Valencia, España.
Hemos tenido la dicha de haberlo conocido por muchos años en nuestras tierras de Atacama.
Fue párroco en distintas localidades de la diócesis de Valencia y misionero en Chile durante 21 años, ha fallecido a los 90 años de edad en la Casa sacerdotal de Betania de Quart de Poblet, en donde residía.
La misa exequial por el eterno descanso de Juan Sanchis tendrá lugar mañana, martes, a las 16 horas, en la parroquia de su localidad natal, Piles, presidida por el cardenal arzobispo de Valencia.
Posteriormente, sus restos mortales serán inhumados en el Cementerio de Piles. Su Capilla Ardiente será instalada en el Tanatorio Mondúber de Gandía.
Mañana martes 01 de febrero a las 12:00 se celebrará la Santa Misa en la parroquia Inmaculado Corazón de María en su memoria.
Juan Sanchis Ferrairó, nacido en Piles en 1932, recibió la ordenación sacerdotal en 1955 en Valencia. Un año más tarde fue nombrado vicario parroquial de la parroquia Visitación de Nuestra Señora de Real de Gandia hasta que en 1960 pasó a desempeñar otros oficios como misionero de la OCSHA, en Copiapó, Chile. Así, estuvo como misionero en nuestra diócesis desde el año 1960 a 1967, y nuevamente desde 1987 a 2001. Fue párroco en Chañaral y Vallenar, además del fundador y creador de la Corporación Mi Pequeño Hermano, que atiende a personas con problemas de movilidad.
Nos ha recordado, a través de sus libros, el paso de tantos misioneros valencianos que han pasado por nuestra diócesis y que quedarán en nuestra memoria e historia.
El P. Juan escribía recuerdos y pensamientos de los pequeños acontecimientos que le sucedían en el día, desde su época de seminarista. Escribió algunos libros: "Hemos visto florecer el Desierto", y ya jubilado, en 2008 se propuso escarbar entre sus carpetas, algunos de sus escritos y nos entregó su libro "Recuerdos y Experiencias, para los amigos". En ese libro escribió:
"De mis deseos, sueños, sólo es válido lo que el Señor haya podido rescatar, el resto son palabras, habladas o escritas arena a merced del viento. Una flauta, una cítara o el mejor stradivarius son materia inerte y no pueden vanagloriarse de su melodía, obra de las manos virtuosas del artista. Y al final de la vida (lo veo con mayor claridad a medida que pasan los años) solamente podremos confiar en la fidelidad y la misericordia del Buen Dios, que no nos falla".
Ponemos en las manos del Señor a este buen sacerdote, que le ha seguido con tanta fidelidad.
Fuente: Comunicaciones Copiapó
Copiapó, 31-01-2022