Con casi cinco siglos de historia, desde 1561, nuestra arquidiócesis ha elaborado un proyecto de ayuda y servicio hacia los más pobres y necesitados de nuestro país, destacando entre otras labores, la creación de la Vicaría de la Solidaridad, la Academia de Humanismo Cristiano y la Vicaría de la Pastoral Obrera.
Sus orígenes, datan del año 1540, cuando la expedición de conquista liderada por Pedro de Valdivia, junto al bachiller Rodrigo González Marmolejo y los sacerdotes Juan Lobo y Diego Pérez; constituyeron la primera Iglesia en el Santiago del Nuevo Extremo, ciudad fundada un par de meses después, el 12 de febrero de 1541.
Pero no fue hasta veinte años después de la fundación de la ciudad en 1561, que el Papa Pío IV creó la Diócesis de Santiago, cuyo primer obispo fue el bachiller González Marmolejo, quien no pudo ser consagrado por enfermedad y tomó posesión de la diócesis por medio de un apoderado. Luego, le sucedieron los franciscanos: Fernando de Barrionuevo, Pedro de Azuaga y Diego de Medellín.
Fue este último, Fray Diego de Medellín, quien organizó la Diócesis de Santiago. Su participación en el Tercer Concilio de Lima influyó en su labor. Entre sus principales obras se cuentan la división de la diócesis en cuatro parroquias y veintiséis doctrinas de indios. Fundó el Seminario Conciliar, ordenó cuatro mestizos como sacerdotes, celebró el primer Sínodo diocesano en 1586 y erigió canónicamente el primer monasterio femenino, el de las Clarisas en Osorno en 1571.
Además, mercedarios, dominicos, franciscanos, jesuitas y agustinos, se integraron desde los inicios a la actividad misionera y en torno a sus conventos se crearon cofradías, terceras órdenes y se desarrolló una religiosidad popular devocional.
En la actualidad, desde inicio de los años 90, la Arquidiócesis de Santiago fue liderada por monseñor Carlos Oviedo Cavada, quien asumió el 22 de abril de 1990 y debido a una grave enfermedad, debió renunciar en febrero de 1998. Como Administrador Apostólico con Sede Plena, fue nombrado monseñor Sergio Valech Aldunate. El cardenal Carlos Oviedo falleció el 7 de diciembre de 1998.
El siguiente Arzobispo de Santiago fue monseñor Francisco Javier Errázuriz, desde abril de 1998 y luego, en diciembre de 2010, fue nombrado Arzobispo de Santiago monseñor Ricardo Ezzati, tomando posesión el 15 de enero de 2011. El 27 de diciembre de 2019, el papa Francisco nombró como decimocuarto arzobispo de Santiago a monseñor Celestino Aós Braco, quien asumió el cargo el 11 de enero de 2020, tras una labor como Administrador Apostólico desde marzo de 2019.
Fuente: Comunicaciones Santiago
Santiago, 27-06-2020