Monasterio de Osorno abrió su Puerta Santa para acercar más a los fieles a la Misericordia del Señor
“Templo de Dios, templo santo, casa de la gloria eterna de Dios, abre tus puertas para que entren los que buscan misericordia”. Con estas palabras y después de la bendición y de golpear tres veces, el Obispo Jorge Concha Cayuqueo abrió la puerta santa de la capilla del Monasterio María Madre de la Unidad, este domingo 29 de septiembre.
Las Monjas Carmelitas, junto al Administrador Apostólico de la Diócesis de Osorno y los fieles presentes, ingresaron a la capilla en procesión para celebrar la eucaristía, y como signo que también buscan la indulgencia plenaria e invitar a toda la comunidad, en solitario o en grupos, a peregrinar hasta el lugar en busca de la misericordia del Señor.
Siempre pedimos “al Padre la remisión de los pecados, pero hoy los monasterios de las hermanas Carmelitas son lugares especiales y es un momento especial, estamos viviendo un año jubilar por el primer centenario de la muerte de Santa Teresa de Los Andes, entonces podemos renovar con más fervor, con una mayor preparación, esta Gracia que nos ofrece Dios”, dijo el Obispo Jorge durante su homilía.
“El Papa Francisco ha tenido a bien permitir este tiempo de gracia, desde el 13 de julio del 2019 hasta el 13 de julio del 2020”, para que los fieles que peregrinen a estos lugares santos puedan obtener la indulgencia plenaria”, señaló el Pastor de Osorno y explicó que para ello se deben cumplir las condiciones habituales: la confesión sacramental, la comunión eucarística y orar por las intenciones del Obispo de Roma.
“Las capillas de los monasterios de las Carmelitas Descalzas de Chile han sido declarados templos jubilares. Es un gran don para la Iglesia porque esta sencilla mujer chilena que descubrió lo esencial para ser feliz, nace dentro de una familia común, que tiene sus momentos alegres y de dificultades, Dios la santifica y la configura a imagen de su Hijo Jesucristo”, agregó.
Continuó su mensaje, y aseguró que “la Orden del Carmelo consideró que no es casualidad celebrar este primer centenario, porque nos ayuda a volver la mirada a lo esencial de la vida: solo Dios, configurarnos a vivir cada vez más la experiencia transformadora del Señor Jesús, caminando como familia que nos lleva a crecer en la confianza y mutua animación de nuestra vocación de Hijos de Dios”.
“Es un precioso don para nuestra diócesis el hecho de que en nuestro territorio tengamos el Monasterio Santa María Madre de la Unidad, porque se nos regala la posibilidad, para todos nuestros hermanos y hermanas que lo deseen, obtener la indulgencia plenaria, acercarse una vez más a la misericordia de Dios”, añadió el Obispo Jorge Concha Cayuqueo.
También fue enfático al explicar que la puerta santa “que acabamos de abrir es signo de la única puerta que es Jesucristo. Él dice: Yo soy la puerta, si uno entra por mí, estará a salvo, (Jn 10). Tendremos la oportunidad queridos hermanos y hermanas, de acoger esta invitación que nos hace el Señor, el Buen Pastor que da la vida para que sus ovejas tengan la vida eterna, la vida en abundancia”.
Fuente: Comunicaciones Osorno
Osorno, 30-09-2019