l. El conflicto producido en la Universidad de Chile causa profunda inquietud en el país, por lo que esta Universidad representa, como parte fundamental del patrimonio cultural de nuestra patria.
2. El doloroso suceso ocurrido días atrás, que ha dejado herida a una joven estudiante, y a un carabinero, en circunstancias aún no aclaradas judicialmente, ha venido a poner una nota especialmente tensa en el desarrollo de los acontecimientos.
Pedimos que los hechos sean esclarecidos cuanto antes por la justicia, que Carabineros de Chile y estudiantes conserven la serenidad y que, por muy doloroso que sea lo ocurrido, no se pierda de vista el problema de fondo que es la situación de la Universidad.
3. El actual conflicto sólo podrá superarse a través de un diálogo abierto. Que no se pretenda imponer soluciones, sin un previo debate entre las personas concernidas.
La falta de diálogo, de debate público, que muchas veces hemos lamentado, es especialmente penosa cuando las personas afectadas son universitarios, habituados a manejar ideas y a discutidas libremente y cuando tanto se puede enriquecer una medida, aprovechando la participación de todas las personas competentes.
4. Estimamos que en el campo de la educación y de la cultura es donde más se debe conversar entre todos los interesados, ya que el educador y el intelectual deben estar convencidos de lo que dicen y hacen, y difícilmente lo estarán si tienen la impresión de no haber sido oídos.
5. Pedimos a todos que se abran al intercambio de ideas y a los sacrificios necesarios dando al país, a nivel universitario, un ejemplo de cómo se puede encontrar la verdad y abrir mejores caminos, mediante la colaboración de todos en la búsqueda del bien común.
† Bernardino Piñera C.
Arzobispo de La Serena
Presidente de la Conferencia Episcopal de Chile
Santiago, septiembre 29 de 1987