En medio del cariño de los fieles y de las comunidades que tendrán a su cargo, asumieron los nuevos vicarios de las Zonas Norte y Centro, los Pbros. Pedro Ossandón y Francisco Javier Manterola, respectivamente.
La mañana del sábado 18, en medio del cariño de los fieles, religiosas, sacerdotes, representantes de comunidades y movimientos apostólicos, y de autoridades locales, asumió como nuevo Vicario de la Zona Norte el presbítero Pedro Ossandón.
La toma de posesión tuvo lugar durante una eucaristía presidida por el Arzobispo de Santiago, cardenal Francisco Javier Errázuriz, y concelebrada por los obispos auxiliares; junto vicarios zonales y ambientales y párrocos de la zona.
El ambiente de cálida adhesión eclesial hizo decir al cardenal que “ustedes hacen difícil la partida del vicario Javier Manterota y fácil la llegada del padre Pedro Ossandón”. El propio Arzobispo dio a conocer los términos del decreto de nombramiento del nuevo vicario, tras lo cual el Pbro. Pedro Ossandón hizo su solemne Profesión de Fe y juró sobre los Evangelios fidelidad a la Iglesia y a sus pastores.
Durante su homilía, el Arzobispo de Santiago reflexionó sobre la parábola del Hijo Pródigo, destacando las características de cada uno de sus personajes. Enfatizó en el arrepentimiento del hijo pródigo, en el sufrimiento y el amor del padre y en la envidia y formalismo del hijo mayor.
Terminada la homilía el padre Pedro renovó ante su pastor y el pueblo fiel sus promesas sacerdotales. Luego recibió el saludo de la paz de los pastores, el clero presente y la comunidad de la zona norte.
Al final de la eucaristía, el cardenal Francisco Javier Errázuriz tuvo especiales palabras de gratitud para el vicario saliente, Pbro. Javier Manterola, quien asumió como vicario de la Zona Centro.
Por su parte, el nuevo vicario de la Zona Norte agradeció la confianza del pastor y expresó su amor por la Iglesia que lo acogió, lo educó y le mostró nuevos aires con sus continuas renovaciones pastorales, especialmente en América Latina y El Caribe. Añadió que de un encuentro con Cristo “brota toda la vida”, tras lo cual anunció una primera Asamblea Zonal para el 6 de abril.
Durante toda la celebración el nuevo vicario estuvo acompañado por una nutrida y cariñosa delegación de las parroquias donde se desempeñó con anterioridad, especialmente de San Cayetano, de La Legua, donde fue vicario parroquial hasta el momento de asumir esta nueva responsabilidad.
Vicario de Zona Centro
En tanto, el nuevo Vicario de la Zona Centro, Pbro. Francisco Javier Menterola, asumió su cargo durante una Eucaristía celebrada en la tarde del viernes 17 de marzo, en la capilla del colegio de los Sagrados Corazones.
La Misa fue presidida por el Cardenal Errázuriz, quien agradeció la fructífera labor del Pbro. Gallardo en esta porción de la Arquidiócesis y dio la bienvenida al nuevo vicario. “Con mucha alegría he venido a presidir este acto en que nuestro hermano Héctor Gallardo va a dejar de ser el Vicario Episcopal, trasladándose a la Zona Oeste, y el Padre Javier Manterola, con toda su experiencia en la Zona Norte, quiere a ponerse al servicio de estos decanatos, comunidades y sacerdotes”, señaló el Arzobispo de Santiago, antes de iniciar la Eucaristía.
En su homilía, el Pastor destacó tres misterios que el Señor confía a sus hijos: el de la fraternidad, el de la Iglesia y el de la Pascua. “Tenemos –destacó- que ser hombres y mujeres de esperanza, pero que al mismo tiempo tengan el realismo suficiente para ver de qué manera muere el hijo del hombre y de qué manera muere, también, toda persona que lo sigue, porque está llamada a cargar su cruz; de lo contrario, no es discípulo del Señor”. Continuó diciendo, “cuántas veces ocurren fenómenos de muerte entre nosotros, pero al mismo tiempo sabemos que el pecado que causó la muerte fue vencido en la cruz de Cristo. Por lo tanto, somos testigos de la Resurrección que se da en nuestra vida, en las obras que Dios nos confía, en las comunidades que nos entrega. Qué importante es que anunciemos este misterio siempre: aquél que murió está vivo y nos llama al Reino de la Vida, de la Paz y de la Amistad”, manifestó Monseñor Errázuriz.
Tiempo para renovarse
Durante la eucaristía, el nuevo vicario de la Zona Centro renovó sus promesas sacerdotales. Refiriéndose a su nueva misión, dijo: “Confío en que la Gracia de Dios y la ayuda de San Alberto Hurtado me irán conduciendo en las labores de la Iglesia”. Respecto al trabajo pastoral para este año, el énfasis del primer semestre estará puesto en las Líneas Pastorales de la Arquidiócesis, mediante el fomento del proceso de iniciación cristiana, de la misión y también en la participación en la V Conferencia del Episcopado Latinoamericano. “Es muy bueno pensar esta reflexión de discípulos y misioneros para que nuestros pueblos en El tengan vida, en torno a los 200 años de la independencia patria”, indicó.
El Pbro. Manterola, luego de la Eucaristía, compartió con sus nuevos feligreses de la zona y con quienes en la zona norte. A todos ellos manifestó su gratitud y dijo estar especialmente disponible para los sacerdotes, las familias, los jóvenes y, sobre todo, para los más necesitados de su nueva zona.
Fuente: DOP Santiago
Santiago, 20-03-2006