Con un masivo encuentro en el Centro de Extensión de la Universidad Católica se dio inicio al año pastoral 2006 este viernes 17 de marzo por la mañana. Al encuentro asistieron todos los vicarios zonales y ambientales, sacerdotes de la Arquidiócesis, diáconos permanentes, religiosas y laicos comprometidos.

En un ambiente lleno de entusiasmo, la Vicaría General de Pastoral dio a conocer las líneas pastorales para el presente año, tiempo de gracia que estará atravesado por la renovación de los agentes pastorales y la activa participación de los grupos en el proceso de consulta para la V Conferencia del Episcopado Latinoamericano que se celebrará durante el mes de mayo en Aparecida, Brasil.

Las líneas de trabajo para parroquias, capillas, colegios, comunidades y movimientos tratan del encuentro personal con Jesucristo, la comunión y la participación en la Iglesia y el envío misionero. En su presentación, el Cardenal Francisco Javier Errázuriz destacó el camino alcanzado en la arquidiócesis luego del proceso sinodal, el jubileo y las orientaciones pastorales anteriores. Ante los asistentes aclaró: “hace tiempo tenemos conciencia que continuar con procesos pastorales no es como leer un libro donde uno da vuelta la página, sino que es un proceso de fidelidad a la conducción del Buen Pastor”. En este contexto, agregó, la preparación a la V Conferencia del Episcopado Latinoamericano no es algo ajeno, sino “agua refrescante que llega hasta nosotros y que enriquece todo el trabajo pastoral que estamos haciendo”.

Por su parte, el Pbro. Rafael Hernández, Vicario General de Pastoral, recordó que el objetivo de las líneas pastorales de la Arquidiócesis durante el 2006 – 2007 es “renovarnos como discípulos de Jesucristo, para realizar con nueva audacia nuestra misión evangelizadora al servicio del Reino en nuestra ciudad”. Luego explicó cada una de las líneas pastorales acercándolas a la realidad de las parroquias. Por ejemplo, destacó la centralidad del encuentro con la persona de Jesucristo para el proceso de renovación en la Iglesia de Santiago, también instó a fortalecer la acogida y las comunidades en las parroquias, como también a acercarse a quienes están más alejados de la Iglesia.

Junto a la Iglesia Latinoamericana

En un tercer momento, el Cardenal Errázuriz expuso a los asistentes el tema de la V Conferencia, que el Papa aprobó recientemente, la metodología y las esperanzas que están puestas en este encuentro. Para comenzar, explicó los signos positivos y negativos de la cultura que impulsaron a los obispos a proponer al Papa una V Conferencia del Episcopado latinoamericano. Al respecto, Monseñor reiteró el desafío de proteger las raíces católicas del continente y de nuestra cultura mediante el testimonio, la coherencia y, en definitiva, la santidad de vida.

“Discípulos y misioneros de Jesucristo para que nuestros pueblos en Él tengan vida” es el lema de la reunión del episcopado latinoamericano para el próximo año. “Discípulos, esta palabra de gran riqueza bíblica, expresa la gran novedad de esta Conferencia General”, indicó el Arzobispo. “Ha sido necesario descender hasta llegar en profundidad a la persona que se encuentra con el Señor, al sujeto de las grandes tareas”, expuso el Cardenal. Finalmente enfatizó que la participación de los católicos es primordial, ya que constituirá la base del trabajo posterior. Añadió que espera que este tiempo sea además una ocasión de conversión personal de los católicos, ya que en ella el Señor habla y espera la respuesta de sus hijos.

Manos a la obra

Tras la intervención del Cardenal, el Pbro. Fernando Tapia dio a conocer detalladamente los materiales disponibles para que las comunidades empiecen a reflexionar los contenidos para preparar la V Conferencia. Sugirió, por ejemplo, que el proceso comenzara con una Eucaristía y que cada encuentro en los grupos tuviera una metodología que motivara al diálogo y la elaboración de propuestas, siempre inspirados por un texto del Evangelio. (El instructivo, las sugerencias para la Eucaristía inicial y la propuesta para el primer encuentro están también disponibles en formato Word al final de este artículo)

El proceso de preparación es una gran oportunidad para que los grupos participen activamente en la V Conferencia y, con un espíritu agradecido del paso de Dios en sus vidas, compartan su experiencia pastoral y espiritual con miles de hermanos de Latinoamérica para que los pueblos tengan vida en Cristo, sostuvo el presbítero.

Agentes pastorales comprometidos

Renato Giavio, párroco de San Martín de Porres en la zona sur de Santiago, está esperanzado en que este año se fortalecerán las comunidades cristianas de base. “Las comunidades tienen un papel preponderante en este tiempo”, indica, “no se trata de darles más pega, sino que al trabajo que hacen, darle la dimensión del discipulado. Un joven, un catequista es siempre un discípulo de Cristo y eso no debemos olvidarlo”.

Regina González, religiosa filipense de la zona norte dice: “cuando los pastores nos hablan, nos hacen sentir muy renovados, porque la fe es algo vivo. Este inicio de año nos hace levantar el ánimo para comenzar a trabajar y a transformar la cultura y derrotar los antivalores con un testimonio cristiano”. Agrega, “de eso se trata el revivir la fe: ir a los lugares más alejados y llevar a Cristo como en los primeros tiempos”.

Arturo Aguilar, seminarista destinado pastoralmente a la Parroquia San Norberto en la zona Oriente cree que “las líneas pastorales nos ayudarán mucho a fomentar la acogida en las comunidades, potenciar la misión y pensar a la parroquia como comunidad de comunidades”. Añade, “me gustó mucho que la invitación a la V Conferencia y las líneas pastorales estén sustentadas en el encuentro con Jesucristo. Esto es fundamental para guiar a los laicos hacia una mayor cercanía con Dios”.

Orieta Aguilera, catequista de la Parroquia San Andrés, opina que luego del encuentro buscará “reflexionar, con la mirada puesta en Jesús, sobre la manera de ir renovándonos”. “Tenemos que reavivar nuestro espíritu misionero”, dice convencida, “porque necesitamos invitar a otras familias para que participe en la parroquia. Vamos a salir casa a casa para dar acogida a las nuevas familias que se han incorporado a nuestro barrio. Como dijo el Cardenal, vamos a invitar a los nuevos vecinos para que no se sientan tan solos, para que sepan que tienen un lugar de acogida en nuestra parroquia”.

Mons. Cristián Precht, Vicario de la Zona Sur, señala: “tengo una expectativa altísima de este nuevo año pastoral. Tengo ganas de renovarme y trabajar para la V Conferencia. Tenemos una situación nueva en el país y una situación nueva en América Latina y eso nos obliga a repensar el Evangelio para los tiempos nuevos”.

Instructivo

Sugerencias para la Eucaristía inicial

Propuesta para el primer encuentro


Fuente: DOP Santiago www.iglesiadesantiago.cl
Santiago, 17-03-2006