Declaración sobre firma, por Cancilleres de Chile y Argentina, de declaración conclusiva del proceso de Mediación
El 23 del presente mes, “por iniciativa y a invitación del Santo Padre”, los Cancilleres de Chile y Argentina, en representación de sus respectivos Gobiernos, firmaron una declaración en la que expresan “su decisión de preservar y desarrollar sus vínculos de paz inalterables y amistad perpetua y solucionar, por tanto, siempre y exclusivamente por medios pacíficos las controversias de cualquier naturaleza entre sus respectivos países”.
La trascendencia de este acto no puede sino llenar de alegría a todos los chilenos y argentinos. El afirma la voluntad seria de amistad y paz entre ambos pueblos, rechaza explícitamente el camino de las armas y hará posible la reducción de los gigantescos gastos de guerra, ya sea en personal, en armas o en construcciones relacionadas con la defensa.
Ambos pueblos podrán ahora unir sus energías para abrir el camino de la integración.
Agradecemos a Dios el haber guiado las voluntades hacia esta etapa conclusiva, al Sumo Pontífice que ha seguido con paciencia y constancia todos los pasos conducentes a ello y a los Gobiernos y delegaciones que consagraron su voluntad y esfuerzo a esta noble causa. Ambos países recordarán siempre sus nombres con gratitud.
Quiera Dios conducir los pasos finales hasta el tratado definitivo de paz perpetua.
El Comité Permanente de la Conferencia Episcopal de Chile
Santiago, 28 de enero de 1984