Con una masiva y muy participativa procesión en honor a la Virgen del Carmen, la Iglesia de Santiago celebró el Día de Oración por Chile, en el último domingo de septiembre. Cientos de familias se unieron a la peregrinación por las calles céntricas de la capital, sumándose a delegaciones de parroquias, colegios, movimientos apostólicos y fieles en general. Igualmente concurrieron adultos mayores de la Fundación Las Rosas, voluntarios de Cáritas y representantes de las cuatro ramas de las Fuerzas Armadas. Además participaron numerosas religiosas y sacerdotes.

La procesión se inició a las 16:00 horas desde el atrio de la Catedral y fue encabezada por el Nuncio Apostólico, Mons. Aldo Cavalli; los Obispos Auxiliares de Santiago, Mons. Ricardo Ezzati, Mons. Andrés Arteaga y Mons. Cristián Contreras Villarroel; el Arzobispo Emérito de Antofagasta, Mons. Patricio Infante; y el Obispo Castrense, Mons. Juan Barros.

Esta tradicional muestra de fe estuvo acompañada por cantos y rezos dirigidos por sacerdotes y seminaristas, quienes pusieron énfasis en la oración por la Patria, las familias y las vocaciones sacerdotales, en el contexto del año de la Eucaristía y de la canonización del Padre Hurtado.

Ocasión para meditar sobre la santidad

El Nuncio Apostólico, Monseñor Aldo Cavalli, presidió la Eucaristía con la que finalizó la procesión. En su homilía llamó a vivir la santidad al cien por ciento como lo hicieron Teresa de Los Andes y el Padre Hurtado. “En mi vida, en tu vida, cada acción, cada iniciativa, cada pensamiento, cada ocasión es para realizar totalmente la voluntad del Señor Jesucristo. Esa es la santidad”, dijo. “Ahora tenemos un mes de preparación a la canonización del Padre Hurtado, ésta puede ser una ocasión para meditar sobre su santidad y mi santidad. Es una ocasión para mejorar nuestra vida, para tomar la decisión de responder al Señor totalmente”, agregó Mons. Cavalli.

Finalizada la Eucaristía, la imagen de la Virgen del Carmen fue trasladada hasta el interior de la Catedral para que grupos de parroquias y movimientos tuvieran ocasión de rezar junto a ella.

Fuente: DOP Santiago
Santiago, 26-09-2005