Comunicado de prensa de la Asamblea Plenaria de los Obispos de Chile: Informa sobre acuerdos de la Asamblea
La Asamblea Plenaria de los Obispos reunida en San José de Mariquina continuó estudiando el plan de acción pastoral para 1976, recogiendo los aportes de las Comisiones de trabajo y entregándolos a un equipo de redacción.
Entre los asuntos varios consideró los gravísimos efectos que está produciendo especialmente entre la juventud el programa de control de la natalidad propiciado por APROFA, y encomendó a dos Obispos que preparen un documento sobre el tema de la relación sexual desde el punto de vista del amor cristiano.
Se acordó también apoyar el proyecto sobre Clases de Religión preparado por el Depto. de Educación del Episcopado para ser presentado al Ministerio respectivo.
Se estudió el problema de la intervención de las Universidades Católicas y los proyectos de regionalización que pueden afectarlas. Se acordó respaldar la línea seguida por Mons. Santos y la Comisión Consultiva Universitaria, renovar el propósito de la Iglesia de no renunciar al derecho de poseer y conducir libremente sus propias instituciones de educación superior, reafirmar el derecho exclusivo de la Iglesia para decidir sobre la continuidad de las sedes o la supresión de ellas cuando las circunstancias así lo aconsejaren, con el mejor deseo de colaborar en una racionalización de los recursos universitarios del país.
Con respecto a la próxima disolución del Comité de Cooperación para la Paz, los Obispos acordaron enviar una carta a su directiva para agradecerle públicamente la amplia labor humanitaria y cristiana realizada en todo el país y proteger la fama y la seguridad de sus colaboradores. Se estudiaron diversas modalidades para la labor en cada Diócesis dentro del espíritu ecuménico de colaboración con otras Iglesias. En una hora de tanta responsabilidad la Iglesia no puede eludir un testimonio de caridad y comprometerse en un servicio fraternal a todos los que sufren.
Se expresó el deseo de que llegue pronto el día de una completa paz y reconciliación.
Se acordó también felicitar al Instituto Católico de Migración por sus 20 años de silenciosa labor.
San José de Mariquina, 17 de diciembre de 1975
