La fraternidad entre los pueblos y la vocación que tiene Chile para la paz, es el primer compromiso con que la fiesta de Nuestra Señora del Carmen de La Tirana, quiere contribuir a en la construcción del camino hacia el bicentenario de nuestra Patria.

Así lo afirmó Monseñor Marco A. Ordenes Fernández, Administrador Diocesano del Obispado de Iquique, en la conferencia de prensa que ofreció hoy 9 de junio con motivo de entregar detalles de la celebración religiosa de mayor importancia en la provincia de Tarapacá.

“La iglesia también quiere contribuir a la reflexión de lo que tiene que ser Chile. Desde nuestra realidad nortina y también desde esta fiesta, queremos aportar para mostrar lo que tiene que ser también el alma de Chile. Un alma que se construye no solamente con el desarrollo económico y técnico de un país, sino que con el fomento y fortalecimiento de los valores de la identidad patria, y esta identidad está marcada por una identidad profundamente cristiana. Las bases de la construcción del país se encuentran en esta realidad también cristiana que tiene Chile”, añadió el prelado.

También dijo que “entonces desde esta reflexión y en este ambiente de fiesta y gozo, somos invitados todos los creyentes a poder manifestar desde nuestro encuentro con Jesucristo y en compañía de la virgen santísima, a poder ir hacia el encuentro de la historia del mundo y del país. En esta luz está inscrita la fiesta de Nuestra Señora del Carmen en el Santuario de La Tirana”.

“El año pasado nuestro compromiso estuvo en la Eucaristía, fuente y cumbre de toda acción cristiana. Este año 2005, la fraternidad entre los pueblos y la vocación de Chile a la paz, es el primer compromiso de los seis años que quedan por delante. Es un compromiso con la fraternidad. Queremos en el Santuario recordar lo que significa ser fraternos. Así queremos celebrar la fiesta este año. Queremos celebrar la paz y la vocación común a la fraternidad que tenemos con Perú, Bolivia y Argentina” aseguró Monseñor Ordenes.

Esto, dijo el Administrador Diocesano, será “como el gran signo de este año en el Santuario. Somos hermanos y nos reconocemos como hermanos. Tenemos una identidad y cultura común y eso nos dan más elementos para unirnos que para separarnos. De aquí brota entonces esta invitación a que podamos reconocer a valorarnos como hermanos en la fiesta, especialmente en este año cuando hay tantas tensiones y ambientes adversos. Nosotros los cristianos queremos dar una señal de fraternidad”.

“La virgen es madre de todos los pueblos. Es señora de todas las naciones y nosotros los que vivimos en este cono sur, especialmente en este norte, tenemos una identidad común dada por una cultura común: la cultura andina. También tenemos un especial cariño a la virgen, manifestado también por la cultura del los bailes religiosos que no es propiamente del norte chileno, sino también del sur peruano y del oeste boliviano. Tenemos relaciones importantes de comercio y de vinculación, el futuro de la región depende del futuro del desarrollo de esta zona de la región. Por eso queremos celebrar en el santuario este llamado a la paz, a la fraternidad y al progreso en común”, finalizó Monseñor Marco Ordenes.

Fuente: Comunicaciones Iquique
iquique, 09-06-2005