
Para dar gracias a Dios por la elección del nuevo Papa Benedicto XVI se celebró la Eucaristía, desde las 20:00 horas del martes 19 de abril en el Templo Catedral de Talca.
La celebración eucarística fue presidida por el Padre Mario Molina Guaita, Vicario General de la Diócesis, quien en primer lugar mencionó que grandes hechos han remecido a la Iglesia en las últimas semanas: la agonía y muerte de Juan Pablo II y la elección del nuevo Sumo Pontífice.
Benedicto XVI “cuando habló desde el balcón hace unas horas dijo: ‘me han elegido pese a la insuficiente capacidad para esta tarea’. Siempre será así, siempre la capacidad humana será insuficiente para un anuncio vital, auténtico, que traspase los corazones con el nombre de Jesucristo”, sostuvo el Padre Mario Molina.
Un nombre sugerente: Benedicto

Y agregó el sacerdote: “Nos ha resultado sugerente el nombre elegido: Benedicto. Benedicto XV, su antecesor, fue un gran luchador por la paz, le tocó vivir toda la primera guerra mundial. Fueron innumerables sus esfuerzos porque se lograra la paz, en medio de esa guerra. Después de ella, al morir en el año ’22 de una epidemia de gripe, dijo: ‘ofrecemos nuestra vida por la paz del mundo’”.
“El actual Pontífice, de origen alemán, vio a su padre tener una actitud muy crítica hacia el nazismo y sufrir consecuencias por eso. Él mismo, el año ’43 y luego el ’44, tuvo que ir a entrenarse en un escuadrón antiaéreo y después a la infantería alemana. Por su mala salud vuelve a casa. Terminada la guerra es considerado un soldad alemán y es enviado a un campo de prisioneros”, indicó el Vicario General.
Más adelante el Padre Mario afirmó que tanto Benedicto XV, Juan Pablo II y el Cardenal Ratzinger, han vivido la guerra y por eso saben lo que significa la paz. “Probablemente por eso ha tomado el nombre de Benedicto XVI. Pero eso implica una atención al mundo, a sus problemas, a las vicisitudes por las que atraviesa el hombre en la tierra. La Iglesia está para servir al mundo”, manifestó.
Por último, el Padre Mario Molina llamó a todos pedir la bendición del Señor para el nuevo Papa, y así lo acompañe en esta misión que se le ha encomendado.
Fuente: Comunicaciones de Talca
Talca, 20-04-2005