Junto al Señor Sacramentado se dio inicio al cierre del Año Sacerdotal en Antofagasta. Este tiempo de oración que convocó el Papa Benecito XVI, fue especialmente un periodo de reflexión para el clero local.
Junto al Señor
A las 11 de la mañana se comenzó con una hora santa de adoración al Señor sacramentado, la que se acompañó con la lectura de frases del Santo Cura de Ars sobre el sacerdocio. Los sacerdotes junto a su pastor fueron acompañados por una gran cantidad de fieles que oraron a Jesús presente en la Eucaristía, por la santidad y vida de los clérigos.
Posteriormente, se celebró la Misa votiva del Sagrado Corazón de Jesús, en la cual Monseñor Pablo Lizama, expresó que "en este tiempo, le ha tocado un momento difícil a la Iglesia, en especial a los sacerdotes, es por eso que es necesario renovar el compromiso de la vocación y sobre todo, el sentido de servicio", retomó la figura de San Juan María Vianney, como un modelo de caridad pastoral. Asimismo, agradeció a todos los que concurrieron a la Catedral para acompañar a sus sacerdotes, un signo de que a pesar de los testimonios errados, las personas responden con gratitud ante testimonios sacerdotales fieles y dedicados.Finalizada la celebración, el clero junto al Pastor compartieron un almuerzo fraterno.
Comunidades Religiosas
En la tarde Monseñor Lizama celebrará la Eucaristía en la Parroquia San Pablo, para festejar y dar gracias al Señor por la comunidad de Religiosas del Sagrado Corazón de Jesús, que colaboran pastoralmente en dicho lugar. A su vez, en las Parroquias Madre de Dios y Nuestra Señora del Carmen, la comunidad de religiosas Apóstoles del Sagrado Corazón, que tiene dos misiones en la ciudad, festejaron con sus párrocos y comunidad la especial devoción y espiritualidad que las insta en su vida de consagradas.
Fuente: Comunicaciones Antofagasta
Antofagasta, 11-06-2010