En un ambiente de profunda oración se celebró la Eucaristía de Navidad en la Iglesia Catedral de Antofagasta. Monseñor Pablo Lizama destacó dos puntos centrales en su homilía. El primero fue un llamado a todos los creyentes a rescatar el sentido de la Navidad, es el "no entregarle la Navidad al comercio, no entregársela a los banquetes", agregó que Navidad es "celebrar al Niño Jesús en familia, la cual se reúne, se encuentra en un ambiente fraterno". La segunda idea que expuso el Arzobispo, fue que "en el rostro del Niño Dios, está el rostro de los más pobres, es por ello que nadie puede decir que es dueño de los pobres", recalcando que "de los pobres somos responsables todos, de ellos todos nos debemos hacernos cargo". Finalizó, exponiendo lo radical e importante que es la Navidad no sólo para el mundo creyente, sino, que para toda la humanidad.

Junto con la Eucaristía en el corazón de la Arquidiócesis, se celebraron en diferentes comunidades parroquiales, resaltando en todas el profundo sentido de oración de buenos deseos.

Fuente: Comunicaciones Antofagasta


Antofagasta, 25-12-2009