Con una multitudinaria procesión desde la Basílica de la Inmaculada Concepción, hasta la Iglesia Catedral, los fieles junto al clero, religiosos y religiosas de la ciudad culminaron el Mes de María.

El inicio estuvo marcado por el colorido y devoción de los Bailes Religiosos que engalanan esta celebración, en su Homilía, Monseñor Pablo Lizama expresó que “este mes es una oportunidad de entrar en diálogo con Dios, como el vivido por la Virgen junto al ángel, un diálogo humano-divino”; agregó que “en nuestra vida hay que responder como la Virgen, quien ante la petición del ángel responde con un sí, una afirmación de querer cumplir la Palabra de Dios, es decir, la voluntad del Señor en su vida”. Expresó además, que “es el Señor quien nos guía en nuestra vida, por eso todo cristiano debe decir ¡sí Señor, yo quiero cumplir tu voluntad!”.

En la Eucaristía realizada frente al frontis de la Iglesia Catedral, se oró especialmente por Chile, para que el proceso eleccionario del próximo fin de semana se viva en un ambiente de fraternidad, concordia y de esperanza para construir un país mucho más hermano y fraterno.

En tanto, en Tocopilla, también se realizó una procesión por centro de la ciudad, para gardecer a la Virgen Inmaculada, lo mismo ocurrió en Mejillones y Taltal.

Fuente: Comunicaciones Antofagasta


Antofagasta, 08-12-2009