CONFERENCIA EPISCOPAL DE CHILE
COMISIÓN NACIONAL DE LITURGIA
Solemnidad de la Santísima Trinidad – Solemnidad del Santísimo Cuerpo y Sangre de Cristo
27 de mayo – 03 junio 2018
1.1. Origen de la Semana Litúrgica Nacional
El año 2006 la Asamblea Plenaria de los Obispos, a solicitud de la Comisión Nacional de Liturgia (CONALI), aprobó la realización de una Semana Litúrgica Nacional, la que se efectuaría cada tres años, entre los domingos de las solemnidades de la Santísima Trinidad y del Santísimo Cuerpo y Sangre de Cristo.
Es el anhelo de la Comisión Nacional de Liturgia que a partir de este año, esta instancia de formación para el Pueblo de Dios que peregrina en Chile, se pudiere concretar anualmente. Para ello, se ofrecerá la propuesta de un tema, material y modo de utilizarlo, todo ello como un servicio a las diócesis para facilitar su implementación.
1.2 Lema
En el encuentro que sostuvo el Santo Padre Francisco con la Conferencia Episcopal en pleno, Mons. Santiago Silva Retamales, saludándolo, le manifestó: "Nos hemos propuesto prolongar su visita a nuestro país y su mensaje con un Congreso que se vivirá, en cada Iglesia particular, a partir de marzo hasta noviembre de este año. Así, contemplando a Jesús Eucaristía, buscamos proyectar los frutos de su visita pastoral, los que sintetizamos en lo que el Resucitado ofrece cuando promete a sus discípulos “Mi Paz les doy” (Jn 14, 27)".
La Comisión Congreso Eucarístico Nacional, hizo público, recientemente, el lema:"¿Qué haría Cristo en mi lugar?", también el logo y la oración.
Bajo este lema, la Comisión Nacional de Liturgia, propone en el la orientación de la V Semana Litúrgica Nacional.
1.3 En sintonía con las líneas pastorales del Papa Francisco, del CELAM y las orientaciones eclesiales en nuestro país.
La V Semana Litúrgica Nacional se enmarca en la reciente visita pastoral del Papa Francisco a la Iglesia en Chile, cuya misión fue confirmar en la fe a sus hermanos, que celebran cada domingo la Eucaristía. Bajo el impulso del Espíritu Santo, la Iglesia en Chile dedicará el año 2018 al Congreso Eucarístico Nacional, que no se celebraba en Chile desde 1980.
La liturgia, en cuanto ejercicio del sacerdocio de Jesucristo (Cfr. Sacrosanctum Concilium 7) evangeliza por su belleza dentro de la dinámica de ser una Iglesia en salida. Así lo muestra el Papa Francisco en su exhortación apostólica Evangelii Gaudium: “Por último, la comunidad evangelizadora gozosa siempre sabe «festejar». Celebra y festeja cada pequeña victoria, cada paso adelante en la evangelización. La evangelización gozosa se vuelve belleza en la liturgia en medio de la exigencia diaria de extender el bien. La Iglesia evangeliza y se evangeliza a sí misma con la belleza de la liturgia, la cual también es celebración de la actividad evangelizadora y fuente de un renovado impulso donativo” (1).
El Papa Francisco, en las Audiencias generales de los días miércoles, ha explicado el sentido de la Eucaristía. Cuando comenta sobre la pérdida del sentido del domingo, señala lo siguiente: "En estos contextos es necesario reanimar esta conciencia, para recuperar el significado de la fiesta, el significado de la alegría, de la comunidad parroquial, de la solidaridad, del reposo que restaura el alma y el cuerpo (cf. Catecismo de la Iglesia católica nn. 2177-2188). De todos estos valores la eucaristía es la maestra, domingo tras domingo. Por eso, el Concilio Vaticano II quiso reafirmar que «el domingo es el día de fiesta primordial que debe ser propuesto e inculcado en la piedad de los fieles, de modo que se convierta también en día de alegría y abstención del trabajo» (Sacrosanctum Concilium, 106)" (2).
Junto a esto, las Orientaciones Pastorales Nacionales 2014-2020 manifiestan y anhelan que “el gozo de ser creyentes se transparenta en nuestra vida cotidiana, en el entusiasmo contagioso para proclamar nuestra fe, y de modo especial en nuestras celebraciones litúrgicas. Necesitamos revitalizar nuestras celebraciones litúrgicas para que sean una experiencia más intensa del gozo de ser creyentes; una vivencia más clara de la fraternidad cristiana; un espacio para escuchar meditativa y comunitariamente la Palabra de Dios; un ámbito para reforzar nuestro compromiso de creyentes” (3) .
A propósito de la visita del Santo Padre Francisco y del anuncio del Congreso Eucarístico Nacional el Presidente de la Conferencia Episcopal de Chile, Mons. Santiago Silva, dice al respecto: “Es hora de contemplar a «Alguien», no a cualquiera, sino a Jesús que sale a nuestro encuentro para ofrecerse en diálogo y, por la Eucaristía, en Palabra que da sentido y en Alimento que fortalece nuestro caminar. El Congreso Eucarístico es tiempo y espacio salvífico, porque es encuentro con el Salvador. Es recuperación del sentido de la vida y de la experiencia de comunidades alimentadas por la Palabra. La contemplación, si es auténtica, se transforma en «testimonio» y en «salida misionera» con el rostro impregnado del Resucitado gracias a la Mesa de la Palabra y de la Eucaristía compartida como hermanos en la fe y ciudadanos de este Chile” (4) .
En consecuencia, la CONALI se empeñará profesar públicamente la fe y el amor a Jesucristo en el misterio de la Eucaristía, que no sólo es «el Sacramento principal que la Iglesia celebra», sino el que «contiene todo el bien espiritual de la Iglesia, es decir, Cristo mismo, nuestra Pascua» (Catecismo N. 1324); es el «compendio y la suma de nuestra fe» (Catecismo N. 1327).
Objetivos:
Interlocutores
Actividades propuestas
1. Realizar en el encuentro habitual del presbiterio una evaluación FODA de no más de 30 minutos en vistas a mejorar la preparación integral de la celebración eucarística dominical (se debe tener presente la labor: del sacerdote, diácono, ministros, equipos de liturgia, coros, sacristía), de tal manera de ser conscientes de aquello que se debe mejorar o fortalecer en el arte de celebrar de toda la comunidad.
2. Repetir durante la semana el mismo análisis anterior, pero esta vez en cada comunidad eclesial de base con su pastor o encargado. Lo ideal es abrir este espacio a quienes participan habitualmente en las celebraciones dominicales, aunque no pertenezcan al equipo de liturgia.
3. El día jueves de esta semana se invita a realizar una adoración eucarística catequética de 60 minutos. Para ello se entregará una propuesta celebrativa, cuya simbología invitará a realzar el culto a Jesús sacramentado y su eficacia transformadora para la vida cristiana en la sociedad.
4. Para los equipos de liturgia se entregará el material necesario para realizar el taller: “¿Qué haría Cristo en mi lugar para preparar la celebración Eucarística?”. Mediante una presentación en powerpoint se darán los criterios fundamentales para la preparación integral de la celebración eucaristica domincal. Esto busca revalorizar la Misa del domingo mediante la participación activa de la comunidad en su preparación y celebración. Se ofrecerán fichas con un trabajo grupal, el cual podrá ser enviado a la Comisión Nacional de Liturgia para su revisión. Estos serán también material para el trabajo de esta comisión a lo largo del año.
5. Para quienes deseen profundizar en una espiritualidad eucarística se pondrán a disposición tanto de los ministros ordenados como de los laicos las últimas catequesis eucarísticas-pastorales del Papa Francisco. Estás irán acompañadas por los boletines CONALI – informa sobre la Eucaristía y su dimensión pedagógica cristiana.
(1) FRANCISCO, Exhortación apostólica Evangelii Gaudium, n°24.
(2) FRANCISCO, AUDIENCIA GENERAL, miércoles 13 de diciembre de 2017.
(3) Conferencia Episcopal de Chile, Orientaciones Pastorales 2014-2020, número 21 e.
(4) Opinión/Editorial, 4 de diciembre de 2017, recuperado en: http://www.iglesia.cl/cartas/editorial.php
(5) FRANCISCO, Homilía Misa Crismal (28 de marzo de 2013) [en línea], http://www.vatican.va/news_services/liturgy/insegnamenti/documents/ns_lit_doc_liturgia-bellezza-papa-francesco_sp.html
