Equipos de Liturgia

FIESTA DEL CORPUS CHRISTI

I.- Origen Histórico

La fiesta del Corpus Christi conmemora la institución de la Eucaristía. Se celebro por primera vez en Lieja, Bélgica, el año 1247; Urbano IV instituyo la fiesta para toda la Iglesia con la Bula Transiturus año 1264;  por aquél entonces, tenía la corte en Orvieto, un poco al norte de Roma. Muy cerca de esta localidad se encuentra Bolsena, donde  se produjo el Milagro de Bolsena: un sacerdote que celebraba la Santa Misa tuvo dudas de que la Consagración fuera algo real. Al momento de partir la Sagrada Forma, vio salir de ella sangre de la que se fue empapando en seguida el corporal. La venerada reliquia fue llevada en procesión a Orvieto el 19 junio de 1264. Hoy se conservan los corporales -donde se apoya el cáliz y la patena durante la Misa- en Orvieto, y también se puede ver la piedra del altar en Bolsena, manchada de sangre.

Santa Juliana de Mont Cornillón,  fue la enviada de Dios para propiciar esta Fiesta.

II.- Razones Teológicas

Esta fiesta hay que colocarla en el movimiento teológico y popular de afirmación de la fe en la presencia real de Cristo en la Eucaristía.   “La adoración eucarística tiene como fin la persona divina de nuestro Señor Jesucristo presente en el Santísimo Sacramento (...)Dichosa el alma que sabe encontrar a Jesús en la Eucaristía y en la Eucaristía todas las cosas...”.

San Pedro Julián Eymard

 La contemplación eucarística no es otra cosa que la capacidad, o mejor aún, el don de saber establecer un contacto de corazón a corazón con Jesús presente realmente en la Hostia y, a través de Él, elevarse hasta el Padre en el Espíritu Santo. Contemplar es establecerse intuitivamente en la realidad divina (que puede ser Dios mismo, un atributo suyo o un misterio de la vida de Cristo) y gozar de su presencia. Contemplando a Jesús en el sacramento del altar, realizamos la profecía pronunciada en el momento de la muerte de Jesús en la cruz: Mirarán al que traspasaron (Jn 19, 37).

Es la actividad más escatológica y profética que se pueda realizar en la Iglesia. Ella celebra el misterio de la presencia, del sacrificio, de la comunión, del sacerdocio de Cristo. Es memorial (anámnesis), actualización real y objetiva en la asamblea celebrante, y de forma especial en la asamblea eucarística , de aquellos acontecimientos, sobre todo el misterio pascual, de los que se hace memoria por las palabras y signos a ello destinados, a una activa participación, fructuosa transformación y comunión de los participantes al misterio y misión que significan y presencializan.

III.- CITAS ACERCA DE LA ADORACIÓN

El Señor está verdaderamente presente en el Santísimo Sacramento. Él dijo: "Yo soy el pan de vida bajado del cielo" (Jn 6:35). Jesús es fiel a su promesa, Él nos dice: "Sepan que estoy con ustedes hasta el fin de los tiempos" (Mt 28:30).

El Amor debe ser retribuido con amor: "Donde está tu tesoro allí está tu corazón" (Mt 6:21).

Cuando fijas tus ojos en la Sagrada Hostia y miras con los ojos de tu corazón estás viendo al Hijo de Dios que dijo: "La voluntad de mi Padre que me ha enviado es que todo aquel que ve al Hijo y cree en Él tenga vida eterna, y Yo lo resucitaré en el último día" (Jn 6:40).P. Justo Antonio Lofeudo

VI.-   HIMNOS EUCARISTICOS

Himno Adóro te devote

Te adoro con devoción, Dios escondido, oculto verdaderamente bajo estas apariencias. A Ti se somete mi corazón por completo, y se rinde totalmente al contemplarte.

Al juzgar de Ti, se equivocan la vista, el tacto, el gusto; pero basta el oído para creer con firmeza; creo todo lo que ha dicho el Hijo de Dios: nada es más verdadero que esta Palabra de verdad.

En la Cruz se escondía sólo la Divinidad, pero aquí se esconde también la Humanidad; sin embargo, creo y confieso ambas cosas, y pido lo que pidió aquel ladrón arrepentido.

No veo las llagas como las vió Tomás pero confieso que eres mi Dios: haz que yo crea más y más en Ti, que en Ti espere y que te ame.

¡Memorial de la muerte del Señor! Pan vivo que das vida al hombre: concede a mi alma que de Ti viva y que siempre saboree tu dulzura.

Señor Jesús, Pelícano bueno, límpiame a mí, inmundo, con tu Sangre, de la que una sola gota puede liberar de todos los crímenes al mundo entero.

Jesús, a quien ahora veo oculto, te ruego, que se cumpla lo que tanto ansío: que al mirar tu rostro cara a cara, sea yo feliz viendo tu gloria. 
Amén.

Himno Pange Lingua

Canta, oh lengua, del glorioso, Cuerpo de Cristo el misterio, 
Y de la Sangre preciosa que, en precio del mundo
Vertió el Rey de las naciones fruto del más noble seno.
Veneremos, pues postrados tan augusto sacramento; 
Y el oscuro rito antiguo ceda a la luz de este nuevo;
Supliendo la fe sencilla al débil sentido nuestro.
Al Padre, al Hijo, salud, honor y poder, 
Bendición y gozo eterno: Y al que procede de ambos
Demos igual alabanza.
Amén.  

Documentos de la Iglesia que necesariamente deben ser leídos:

Constitución de la Liturgia Sagrada. (Vaticano II. Cáp. 1 Sec. 10-14)
Dominicae Cenae: Misterio y Culto de la Eucaristía. (Todo; en especial Cáp. 1, Sec 3) Mysterium Fidei: Misterio de la Fe. (Muy importante)
Inaestimabile Donum: Instrucciones acerca del Culto Eucarístico (Todo, en especial Sec B) Eucharistiae Sacramentum: Santa Comunión y Culto Eucarístico fuera de la Misa.
Ecclesia de Eucharistia.


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