Maringwe 30, Como la gente
Maringwe, 25 de septiembre de 2013
Muy queridos hermanos y hermanas:
Es que así nos decía la Yaya: “ande como la gente”, “siéntese como la gente”, “vístase como la gente, puéh”, “salude como la gente!”… aprendí de chico que había que ser ‘como la gente’. Y creo que tenía razón… Y creo también que a muchos curas se nos olvida eso y queremos andar tipo ‘g.c.u.’ (“gente como uno”), con sitios especiales, ropas especiales, distintivos especiales, restoranes especiales, tonteras especiales… No por nada a Jesús le gustaba referirse a sí mismo como ‘hijo del hombre’… que ¿quién no es hijo del hombre?, o ‘nacido de mujer’, como dice San Pablo. Que yo traduzco como ‘hijo de vecino’; y eso es lo que entiendo un poco como la Misión: ser vecino, hacerse vecino, fraterno, solidario, cercano. Y cuando Mariano se mandó el numerito echándole agua al combustible de la camioneta el año pasado nos dejó a pura pata… más cercanos a ser ‘como la gente’. Ha pasado más de un año de ese cuento y a pesar de un montón de complicaciones y retrasos en las tareas (como la apertura de un pozo financiado hace un año por Stefano y sus amigos, el arreglo de nuestro molino de agua, etc.), siento como muy bueno el tiempo de andar a dedo o apretujados en camiones y chapas con las rodillas en la pera con el escándalo de una música insufrible entre gallinas y bultos por 7 u 8 hrs. de viaje a Beira… igual como la gente… Ya no vamos a buscar agua en la camioneta una vez a la semana, sino que en carreta de bueyes… Todo se lentifica en cuanto a ‘tiempo aprovechado’ pero creo que crece en humanización de verdad de nuestra vida. Y justo es el año en que hemos recibido más visitas de Chile… que se han tenido que hacer estos viajes en chapa y/o en camiones o a dedo (380 kms de Beira)… uuf!! Sería como para que nos diera algo de vergüenza pero la verdad es que me da poca, pues ‘la gente’, la inmensa mayoría del mundo, anda así.
Cuando se despidió Arlette, el año pasado, me dijo “lo que le falta a esta Misión es una camioneta” –Claro, con que rooopa…. no teníamos ni pa’ una motoneta. En Santiago se encontró con la (Mega) Anita María y se pusieron en campaña de juntar lucas pa’ una camioneta. Comenzaron a finales de enero y ya a finales de abril tenían para una camioneta (nueva) y media. Qué me decís ti…!! Participaron 68 personas entre conocidos y desconocidos, sanos y enfermos, de medio pelo y pelucones… (camioneta que va a tener muchos nombres). Con lo que se demoran las cosas en África prometen que recién mañana desembarcan la nueva en el puerto de Beira. Además que podremos remolcar la vieja fiel y llevarla a reparar a la ciudad. Pero sobre todo que no se me olvide nunca de andar a pie…
Anita María es una consagrada de la Diócesis de Stgo. hace 10 años. Quería un parelé en su vida que andaba entre 90 y 120 y pensó que Maringwe podría ser un buen lugar para reponerse. Como ‘apresto’ hizo la exitosa campaña de la camioneta y la verdad es que venía ella con las trizaduras normales que tenemos los que vivimos a concho pero de las que cuesta reconocerse. Llegó suspirando y mirando pa’l cielo, haciéndose de coraje… Cuando miró pa’la tierra se encontró con Alice, una chiquilla que habla poco y nada y que tiene una de esas llagas típicas que en África se ven en los tobillos de las personas… fea la llaga. Comenzó con las curaciones diarias y pidió que la recibieran como voluntaria en el Hospital (tras papeleos eternos le dijeron que la contratarían, pero a esa altura la Anita ya estaba empeñada en 10 programas más y no le quedaban ni tiempo ni ganas). Ella también se puso a hacer clases de inglés y alfabetización a los chicos desertores de la Escuela. Tomó muy a pecho a pai Buleza, que está ya postrado, se ha integrado a Kuphedzana y muy especialmente en la Brincaescolinha. Le hicimos ver con Claudia que era bueno involucrar a la familia de Alice en su tratamiento y Anita le entregó a su papá una interconsulta que extendió el médico para que le operaran esa llaga en el hospital de Caia. Hasta la fecha nadie ha hecho nada por Alice y por la llaga se sigue necrosando la piel.
Hoy me encontré a la chica que venía con su tía y unos 7 bidones para llenarlos de agua en el ‘pozo’ cavado en la arena del río. Venían ‘ayudadas’ por una bicicleta a la que le faltaba un neumático, no, además la cadena y… los pedales… puro hueso la ‘bicicleta’, un esperpento... Pucha… y uno esperando una camioneta nueva, los perlas! Yo creo que por lo menos una pezuñita de la vaca que se hizo pa’ la camio destinemos a arreglar la bicicleta de la Alice. Y después la primera salida que haga sea con ella y su tía para Caia a tratar esa herida. Sólo así se puede ir entendiendo la camioneta… bueno y con el resto de los servicios que haga… le vamos a sacar trote a esa joyita. He pensado en ponerle ‘Carmencita’, ‘Carmencha’ o ‘Zita’ porque la pagamos el 16 de julio.
Entre las visitas que tuvimos, Tuti y Alejandro son médicos. Una noche Alejandro no pudo dormir por el lamento incesante de Joaninha, nuestra vecina a la que esa noche se le murió su hijita Filandia, de dos años. Nuestros amigos la habían visto en el hospital y le diagnosticaron un agudo déficit de proteínas… Joaninha y su mamá Luzia son la mar de trabajadoras, un 7 las dos mujeres… y se moría la niñita por desnutrición… al lado de nuestra casa… Nos hicieron llorar a todos. ¡¡Cómo es posible…!! Así que ahora estamos empeñados en el ‘Proyecto Filandia’ para fomentar la crianza de cabras lecheras y enriquecer de proteínas la dieta de la gente… Recuerdo las palabras claras de Jesús: “−Denles ustedes de comer”. Y creo que sólo así es posible celebrar la Eucaristía dignamente...
Después de más de dos años recibimos al obispo en Maringwe. El sucesor de Dom Jaime nunca había pisado Beira. Se llama Claudio y nació en Argentina (órale!) pero es italiano. Entre todos trabajamos y armamos una fiesta a todo trapo –como Dios manda− con 4 sacos de arroz, no sé cuántos kilos de porotos, tomates, cebollas y papas, dos cabritos y un chancho a la olla. De las aldeas vinieron y batucaron danzando ‘la previa’ hasta las 2 de la mañana. La Misa bonitísima (dijo que tenía que ampliar la iglesia…). Cuando se juntó con el Consejo de las comunidades le pidieron que mandara hermanas religiosas a Maringwe y que por favor también otro cura que ayudara al párroco que por más que trabajara no alcanzaba a cubrir lo extenso de la parroquia… Yo la verdad es que hace años rezo todos los días por el cura que ha de venir. Y la verdad también es que en estos días se me olvida dónde puse las cosas que recién tenía en la mano, no recuerdo las palabras y sueño con Punta de Tralca noche por medio… Ando como estilista de la muñeca… Me lloran a gritos unas vacaciones (aparte de ir al dentista, al oculista y otras reparaciones). Ojalá encuentre en Chile un cura que se quiera venir a gastar la vida en estos parajes del reino de Adán y de Dios, de barro y de Comunión, de cruz y de Resurrección…
Y que Jesús, el Hijo del hombre, nos bendiga a Alice, a pai Buleza y a todos con una humanidad llena del Espíritu, como a María de Nazaret, amén.
Kwenda
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