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¿Qué es la Animación Bíblica de la Pastoral ABP?

Monseñor Santiago Silva,
Obispo Castrense

El movimiento bíblico de antes del Concilio Vaticano II se ocupó de la difusión de la Biblia entre los católicos por el escaso conocimiento que éstos tenían de ella.

A partir del Concilio Vaticano II, la pastoral bíblica se centró en la Biblia como su objeto propio, con la finalidad de que la Palabra del Señor fuera conocida y creciera la adhesión a Jesucristo (2 Tes 3, 1); esto acontecía a la par con la reflexión y formulación de la actividad pastoral de la Iglesia como "pastoral de conjunto".

Hoy se abre camino una nueva manera de comprender la pastoral bíblica entendida como: ANIMACIÓN BÍBLICA DE LA PASTORAL de la Iglesia en el marco de la "pastoral orgánica", en donde la Biblia, Palabra de Dios escrita a los hombres y mujeres de todos los tiempos, sea la fuente de la vida de la Iglesia de su misión y se presente como mediación privilegiada para el encuentro con Jesucristo vivo.   Esta nueva perspectiva de la "animación bíblica de la pastoral" responde a la conciencia creciente en la Iglesia de la función irremplazable de la Biblia en la comunicación con Dios y en la misión evangelizadora: "la Palabra de Dios escrita por inspiración del Espíritu Santo es fuente de evangelización, pues por ella la Iglesia se alimenta de la comprensión del Misterio de Dios y alienta la respuesta creyente" (Verbum Domini Nº96).   Todo este esfuerzo ha hecho que el acceso fácil a la Sagrada Escritura que pedían los Padres Conciliares del Vaticano II, se está logrando poco a poco en América Latina y uno de los resultados de esto es que son numerosos los grupos, comunidades de base, familias y agentes de pastoral que han hecho de la Sagrada Escritura su libro de cabecera y, sobre todo, de inspiración para su vida, su compromiso apostólico y su acción pastoral.

En ninguna época de su historia, el pueblo católico ha tenido, como lo tiene en la actualidad, al libro Sagrado tan al alcance de su mano. Este acceso sin pensar que sea ya el mejor, responde al hambre de la Palabra de Dios que el Espíritu ha suscitado en nuestro pueblo creyente según el anuncio del profeta (cf.r Am. 8,11).

Por otra parte, destacamos la importancia de la Palabra en la misión bíblica desde V Conferencia general en Aparecida (Ver Nº 247-249).   "La Misión fundamental, de nuestra Iglesia Católica, en donde nuestro Papa Benedicto XVI, en su discurso inaugural de la V Conferencia, en Aparecida, nos dice: "Ante todo, Cristo se nos da a conocer en su persona, en su vida y en su doctrina por medio de la palabra de Dios. Al iniciar la nueva etapa que la Iglesia misionera de América Latina y del Caribe se dispone a emprender, a partir de esta V Conferencia general en Aparecida, es condición indispensable el conocimiento profundo de la Palabra de Dios. Por esto, hay que educar al pueblo en la lectura y meditación de la Palabra de Dios: que ella se convierta en su alimento para que, por propia experiencia, vean que las palabras de Jesús son espíritu y vida (cf. Jn 6, 63). De lo contrario, ¿cómo van a anunciar un mensaje cuyo contenido y espíritu no conocen a fondo? Hemos de fundamentar nuestro compromiso misionero y toda nuestra vida en la roca de la Palabra de Dios. Para ello, animo a los pastores a esforzarse en darla a conocer."

"Encontramos a Jesús en la Sagrada Escritura, leída en la Iglesia. La Sagrada Escritura, "Palabra de Dios escrita por inspiración del Espíritu Santo" (DV 9), es, con la Tradición, fuente de vida para la Iglesia y alma de su acción evangelizadora. Desconocer la Escritura es desconocer a Jesucristo y renunciar a anunciarlo." Documento Aparecida (DA)V Conferencia Nº 247.

De esta manera la importancia de la presencia de la Biblia en nuestra Iglesia es ya una invitación a seguir trabajando para poner en práctica lo que nuestro Papa Benedicto XVI  nos pidió en el Sínodo sobre la Palabra de Dios en la vida y en la misión de la Iglesia, realizado en octubre de 2008, que nos indica que el avance de la presencia de la Biblia es fundamental y prioritaria en el trabajo pastoral de todo católico: "En este sentido, deseo indicar algunas líneas fundamentales para revalorizar la Palabra divina en la vida de la Iglesia, fuente de constante renovación, deseando al mismo tiempo que ella sea cada vez más el corazón de toda actividad eclesial" (Verbum Domini Nº1).  

La intención general del Apostolado de la Oración de Benedicto XVI para el mes de marzo fue: "Para que la Palabra de Dios sea, cada vez más, escuchada, contemplada, amada y vivida".

En Chile, se ha fortalecido la presencia bíblica desde el trabajo de la Comisión Nacional de la Animación bíblica de la Pastoral, de la Conferencia Episcopal que busca encender en el corazón de cada creyente, un amor profundo por Palabra de Dios viva, amor que contagie y se haga presente en todas las áreas pastorales de la Iglesia y también en el diálogo ecuménico e interreligioso.   Justamente es -la animación bíblica de la pastoral- el medio por el cual se espera que las acciones de la Pastoral Bíblica no se centren con más acciones sólo dirigidas a la Biblia, sino buscar y ofrecer a todas las pastorales el cómo hacer presente el uso e importancia de la Biblia en su propio trabajo, por lo tanto se espera que abriéndose a las mociones del Espíritu se ponga a SSEE como fuente revitalizadora de la vida cristiana y de la misión evangelizadora de la Iglesia. La Iglesia debe encontrar en la Sagrada Escritura «su alimento y su fuerza (cfr. Dei Verbum 24), porque, en ella, no recibe solamente una palabra humana, sino lo que es realmente: la Palabra de Dios (cfr. 1 Tes 2,13)» (Catecismo, N° 104).   Por otra parte, desde la Comisión Nacional de la Animación bíblica de la Pastoral, se ha organizado la presencia de Referentes Bíblicos por diócesis, es decir existe un encargado de hacer realidad la presencia bíblica en toda la pastoral orgánica y la difusión del método de lectura orante de la Palabra de Dios - La Lectio Divina – en donde el director de esta Comisión, Monseñor Santiago Silva Retamales expresa que "hacer de la Palabra de Dios la luz que los guíe todos los días en los caminos del Señor. Para lograrlo, la Lectura Orante de la Biblia es la mejor ayuda"

Con el fin de avanzar en la tarea de que la Palabra de Dios escrita llegue a ser la fuente inspiradora de toda la vida de la Iglesia y de cada creyente, la Comisión Nacional de la Animación Bíblica de la Pastoral, ofrece apoyos a las diócesis para implementar la ABP. Para ello, es necesario contar con algún referente en la diócesis, es decir, alguien que se encargue de hacer realidad la presencia bíblica en toda la pastoral orgánica.

Una forma sencilla para iniciar la implementación de la ABP es la práctica de la Lectio Divina. Ella no sólo es una forma privilegiada de acercarse a la Sagrada Escritura para conocer  y amar a Cristo (Cfr. DA Nº247), sino es también un medio para crecer en amor a la Palabra de Dios. Al respecto decía Benedicto XVI: "Si se promueve la lectio divina con eficacia, estoy convencido de que producirá una nueva primavera espiritual en la Iglesia… La lectura asidua de la Sagrada Escritura acompañada por la oración permite ese íntimo diálogo en el que, a través de la lectura, se escucha a Dios que habla, y a través de la oración, se le responde con una confiada apertura del corazón… No hay que olvidar nunca que la Palabra de Dios es lámpara para nuestros pasos y luz en nuestro camino" (Benedicto XVI, 16 septiembre 2005).

Damos gracias a Dios porque en Chile el método de la Lectio Divina o lectura orante de la Palabra, ha sido ampliamente difundido y hoy, son muchos los católicos que se alimentan diariamente de la Palabra de Vida ayudándose de este método. Sin embargo, hay que tener claro que la Animación Bíblica no se ha agota en la Lectio Divina, por eso queremos invitarlos a seguir trabajando para lograr la implementación de una pastoral orgánica animada por la Palabra de Dios, para que ella se escuchada, meditada, vivida, celebrada y testimoniada (Cfr. Evangelii Gaudium Nº174), convirtiéndose en la fuente de vida que orienta el camino del cristiano.