Compartiendo con Patriarca Ecuménico Bartolomé, la preocupación por el futuro de la creación, el Papa Francisco instituyó el año 2015, en la línea de su Encíclica Laudato Sii, la «Jornada Mundial de Oración por el Cuidado de la Creación», a celebrarse el 1 de septiembre de cada año, "tal como acontece desde hace tiempo en la Iglesia Ortodoxa."
Se quiere que como cristianos ofrezcamos "nuestra contribución para superar la crisis ecológica que está viviendo la humanidad", haciendo de esta ocasión "un momento intenso de oración, reflexión y asunción de estilos de vida coherentes".
(Carta de institucionalización de la JMOCC. 6 de Agosto de 2015)
En este año la celebración de la Jornada Mundial de Oración por el Cuidado de la Creación nos abre una ventana nueva para proclamar con renovado entusiasmo el evangelio de la Creación. En el contexto de la preparación para la Visita Apostólica del Papa Francisco a nuestra patria esta Jornada de Oración es una oportunidad preciosa para acoger y reflexionar su llamado a nuestra conversión ecológica ( LS 5 ) . Este llamado a la conversión significa un nuevo modo de considerar y tratar a las personas y a nuestro ambiente natural; se trata cuidar la casa común poniendo al ser humano en el centro y promoviendo una cultura ecológica integral.
El ambiente, el agua, el aire y la tierra que heredaremos a las generaciones futuras depende de este cambio profundo que necesitamos provocar. La Creación de Dios que recibimos como un regalo, amenazada y herida nos clama que la cuidemos como administradores responsables. Somos parte de ella y protegerla es inyectarle humanidad y futuro a un desarrollo que nos puede llevar edificar un mundo más justo y pacífico.
El Señor nos conceda valentía y creatividad para asumir con espíritu solidario y responsable esta urgente y noble tarea. La esperanza de entregar una Casa fecunda, limpia, sustentable y hermosa a las futuras generaciones pasa, en gran medida, por lo que cada uno de nosotros decida hacer hoy.
