Surgidas de una opción de vida que escucha el clamor de la tierra y el clamor de los pobres, son actos de amor que expresan nuestra dignidad y el sentido de nuestro paso por la tierra (cf. Ls 160).
- Tratar con delicadeza y ternura a los más débiles y con cuidado a los demás seres vivos.
- En las relaciones cotidianas: pedir permiso, agradecer, dominar la agresividad, pedir perdón.
- Evitar el uso de material plástico y de papel.
- Reducir el consumo de agua (duchas cortas, lavar la loza y enjuagarla en un recipiente-no con el agua corriendo, cepillarse los dientes con la llave de agua cerrada…).
- Separar los residuos. Reciclar.
- Dar gracias antes y después de las comidas. Cocinar sólo lo que se va a comer.
- Utilizar el transporte público, compartir el vehículo, caminar o desplazarse en bicicleta.
- Ahorrar electricidad; ej., apagar luces innecesarias y comprar electrodomésticos de bajo consumo.
- Compostar (en lugar de desechar) los restos de alimentos.
- Sembrar árboles.