El sacerdote jesuita fue parte de la Iglesia diócesana de Antofagasta por 20 años, período en cual participó activamente como Asesor General de las agrupaciones de Bailes religiosos y como docente en la Universidad Católica del Norte, por lo que en ambas instituciones, la noticia de su partida, fue recibida con profundo dolor.

Santiago

Este jueves, a las 12.00 hrs., se celebrará la Eucaristía por su eterno descanso en la Iglesia San Ignacio y posteriormente será trasladado al Cementerio de la Compañía en la localidad de Padre Hurtado.

Biografía

El padre José Donoso nació en Santiago el 24 de julio de 1922, siendo el quinto entre 11 hermanos. Ingreso a la Compañía de Jesús en 1940 y fue ordenado sacerdote en 1953 en Lovaina, Bélgica. Estudió Historia del Arte en París, Francia; Licenciado en Filosofía y en Teología, títulos otorgados en Argentina y Bélgica, respectivamente.

Realizó la Tercera Probación en Paray Le Monial, Francia, entre 1954-1955.

Fue profesor de Historia del Arte de varias generaciones de estudiantes jesuitas. Ejerció esa función en la Pontificia Universidad Católica de Chile y en el Instituto Ilades en Santiago, mientras que en Antofagasta enseñó en la UCN.
Estudió Filosofía en San Miguel, Argentina, entre 1945 y 1947; Teología en Lovaina, Bélgica, entre 1952 y 1954. Además, estudió Historia del Arte en París, entre 1965 y 1966.
En la Orden realizó diversas y destacadas labores, entre ellas: profesor de Historia del Arte en el Juniorado, 1955-1966; profesor de Cultura Católica en la UCV y profesor en el Colegio Rubén Castro de Valparaíso, 1957-1961; profesor en el Pedagógico de la UC de Santiago, 1967; profesor en la Universidad Católica del Norte y trabajó en pastoral en Antofagasta, 1968-1981; profesor de Historia del Arte en la Facultad de Teología de la PUC y en ILADES; profesor en el CONFERRE y en la Vicaría de Pastoral Obrera, 1982-1986; nuevamente profesor de Historia del Arte en la Facultad de Teología de la PUC, en ILADES y en el CONFERRE entre 1987 y 1988; asesor de Bailes Religiosos y profesor de Cultura Cristiana, 1996-2003; capellán dominical en CEB Tierra Nueva de la Parroquia San Gabriel, entre otras.

Bailes religiosos

En Antofagasta, la Federación de Bailes religiosos, lo consideraron siempre como un padre, y figura trascendental para ellos. En su rol de Asesor General de los bailes, dejó un gran legado de formación espiritual ente los promesantes. Y en particular, el padre Donoso, fue el gestor y creador, hace ya 40 años, de la actividad denominada “Rosario del Dolor”, un Vía Crucis, teatralizado y cantado, el que es organizado e interpretado en cada Semana Santa por la Federación hasta la actualidad.

Según se cuenta fue idea del religioso jesuita y del empresario José Papic, proponer en 1979 el sector de "La Cantera", (ubicada en la población Oriente de Antofagasta) como el mejor marco natural para esta multitudinaria y tradicional actividad. El lugar está a una cuadra de la capilla Nuestra Señora de Andacollo, lugar de devoción para los bailes religiosos de la Asociación Central.

En resumen el "Rosario del Dolor" es una sentida actividad para toda la comunidad antofagastina, que acerca a los fieles a compartir unidos el sufrimiento y la gloria de Cristo.
Por lo señalado, la agrupación de bailes, celebrará una misa en su memoria, mañana jueves, en la Parroquia Nuestra Señora del Carmen, en horario por confirmar.

"UCN"

En su recuerdo, la comunidad universitaria también celebrará una misa a las 17:00 horas de este jueves 12, en la Capilla María Reina de la Casa Central de la UCN.

El director del Departamento de Teología de la UCN, padre André Hubert, resaltó sus actividades en la educación, tanto en el Colegio San Luis como en la Universidad Católica del Norte, donde fue parte de esa unidad académica y de otras áreas. También realizó varias publicaciones, siendo una de las últimas mientras estuvo en Antofagasta “…Una sabiduría divina, misteriosa, escondida…” (1 Co 2,7), la que fue presentada en octubre de 2005 y en la que agradece el apoyo de las universidades Católica del Norte y Alberto Hurtado, a Revista Mensaje y su equipo y a quienes colaboraron con el desarrollo de la publicación.

El libro se convirtió con el tiempo en un trabajo importante que refleja la personalidad y el sentimiento de un sacerdote seducido e inspirado por Dios y el arte, y que constituye parte de su legado.

Fuente: www.jesuitas.cl y Departamento de Comunicaciones UCN Antofagasta
Antofagasta, 11-03-2015