Nuevo Rector del Santuario Nacional de Maipú

Padre Carlos Cox:

Nuevo Rector del Santuario Nacional de Maipú

 
Jueves 16 de Diciembre de 2004
En ceremonia presidida por el Cardenal Arzobispo de Santiago, Monseñor Francisco Javier Errázuriz, el sábado pasado asumió como nuevo rector del Santuario Nacional de Maipú el padre Carlos Cox, quien además es director del Departamento de Religiosidad Popular del Arzobispado de Santiago. Sucede en el cargo al Padre Raúl Feres.

En la toma de posesión de su cargo, el Padre Carlos Cox recibió de manos del Cardenal Francisco Javier Errázuriz, una Biblia, como una invitación a seguir proclamando la Palabra; un Escapulario de la Virgen del Carmen y la Cruz de Chile, con el fin de seguir evangelizando al millón y medio de personas que visitan anualmente este santuario.

Una capital espiritual

Transformar el Santuario Nacional de Maipú en una capital espiritual, es decir, en un centro que impulse y renueve la evangelización de los chilenos, es el deseo del Padre Carlos Cox. Uno de sus desafíos es renovar la pastoral mariana, lo que significa hacer que el cariño que la gente siente por la Virgen María, se transforme en una manera de vivir. “Hacer de una experiencia afectiva una experiencia efectiva en lo personal y social”, afirma el Padre Cox. Explica que aunque es buena la religiosidad en lo referido al culto, la moral y la forma, es necesario pasar a una dimensión personal de conversión del corazón. “Al sabernos hijos, nos sabemos hermanos y colaboradores”, sostiene. “Por eso, si tuviera que poner un lema al trabajo que se realiza y se proyecta en el Santuario, sería “Chile, tu alma es María”.

Cuando imagina el trabajo pastoral desde el Santuario Nacional, El P. Cox lo hace en el contexto de preparación al Bicentenario de nuestra independencia nacional. “Un lugar donde los constructores de la sociedad puedan ir y recrearse en el corazón de María, para posteriormente concretar los desafíos que nos plantea nuestra sociedad”. En este sentido, el nuevo rector del santuario quisiera descubrir –junto a la comunidad que lo acompañará en su misión- nuevas formas de evangelizar el corazón de nuestra ciudad.

A su parecer, existen cuatro núcleos vitales a los cuales acercarse como centro de fe: la familia, lo laboral, lo escolar y la religiosidad popular. “Las familias son fundamentales para irradiar el mensaje de Jesús en una experiencia cercana y vital”. En lo laboral, cree que es importante invitar a las empresas, los talleres y los trabajadores para elaborar el sentido del trabajo, un ethos laboral que los lleve al compromiso con el otro. “Una tarea fuerte es que el mundo laboral sea ofrecido, agradecido y comprometido acá”, afirma el Padre Cox. Lo escolar se relaciona con los puentes construidos con los profesores de Religión de la Corporación de Educación Municipal y de colegios particulares subvencionados de la comuna. En relación con la religiosidad popular, “la forma en que el pueblo se evangeliza a sí mismo”, el nuevo rector del Santuario Nacional de Maipú reconoce en ella una tradición a cuidar y difundir plasmada en los bailes religiosos, los cuasimodistas y los cantores a lo divino.

“Los Santuarios son centros de peregrinaje, encuentro y conversión de miles de habitantes de Santiago. Un lugar donde acoger al cristiano no integrado a la pastoral de movimientos o parroquias. La Virgen del Carmen, madre y educadora, es la mejor indicada para hacerlo”,dijo..

El Templo en la historia

El Padre Carlos Cox es el tercer rector del Santuario Maipú. El primero fue el Padre Joaquín Alliende, entre los años 1966 y 1976. El Padre Alliende fue nombrado por el Cardenal Raúl Silva Henríquez, que acogió su iniciativa de transformar el Templo en un Santuario Nacional, mariano y popular. Desde entonces ha permanecido bajo el cuidado de la comunidad de los Padres Schoenstatt. Luego vino el Padre Raúl Feres, que estuvo desde 1976 al 2004.

Reseña histórica

Declarado Monumento Nacional, el Santuario está situado en el lugar donde se libró la batalla de Maipú entre patriotas y realistas. En agradecimiento al triunfo de las tropas chilenas, Bernardo O’Higgins prometió consagrar a la Virgen del Carmen como patrona de Chile y levantar un templo en su homenaje. Su construcción comenzó a realizarse en 1944.

El origen del templo votivo de Maipú se remonta al 5 de diciembre de 1811 en el que se declara protectora de la Patria a la Santísima Virgen del Carmen. El 14 de marzo de 1818, el pueblo de Santiago y sus autoridades, prometen construir un templo en el lugar donde se afiance para siempre la libertad de Chile. En el mismo año se decreta la iniciación de las obras y en el mes de octubre se pone la primera piedra. La construcción fue lenta. En 1892 se bendijo el primer Templo de Maipú, que sería parroquia local hasta 1974. El terremoto de 1906 y el temblor de 1927 hicieron necesario reconstruir el templo porque su estructura quedó muy dañada. El 8 de diciembre de 1942, el Congreso Mariano que se celebró en Santiago, tomó como único acuerdo de esta reunión prometer convertir el modesto Templo de Maipú en un grandioso Santuario de la Patria. El 16 de julio de 1948 el Arzobispo de Santiago, Mons. José María Caro, ordenó iniciar la construcción del nuevo Santuario, que se terminó en 1974. El 27 de enero de 1987, Juan Pablo II concedió a este santuario el título de "Basílica Menor". En 1997 se instaló en ella un carillón con 23 campanas computarizadas, de diferentes tamaños, con variadas tonalidades y 65 melodías. Los temas de las vidrieras son alusivos a la Santísima Virgen, los sacramentos, las parábolas evangélicas y la geografía de Chile. En la vidriera de la torre, se representa la glorificación de la Virgen del Carmen.

Ubicado en Carmen con Avenida 5 de Abril. El Templo simboliza la imagen de la virgen, con su velo y sus brazos acogiendo a su pueblo. Su construcción se inició el 16 de Julio de 1944 por iniciativa de Monseñor José María Caro. El nombre de Templo Votivo de Maipú se oficializó mediante el decreto que firmó Don Carlos Ibáñez del Campo, en 1958. El 27 de enero de 1987 se le confirió el título de Basílica Menor por S.S. Juan Pablo II.
Sus dimensiones son: 90.0 metros de largo, 75.0 metros de ancho y 88.6 metros de alto incluyendo la cruz. Las puertas tienen 8 metros de altura y pesan 2 toneladas cada una. La cruz tiene una altura de 9 metros y un peso de 1950 kilos.
Santiago, 16-12-2004