Cardenal Errázuriz invitó a reflexionar sobre el Chile que queremos para el Bicentenario

Cardenal Errázuriz invitó a reflexionar sobre el Chile que queremos para el Bicentenario

 
Viernes 24 de Septiembre de 2004
- Arzobispo de Santiago afirmó que “el Bicentenario de nuestra Independencia Nacional, puede ser ocasión de reencuentro con el ‘Alma de Chile’, y de proyección de la mirada hacia el futuro con la voluntad de refundar al país, a partir de la fecundidad de los valores esenciales que sustentan nuestra identidad nacional”.

-Al culminar el Mes de la Patria 2004 y a seis años de la celebración del Bicentenario de nuestra Independencia, obispos llaman a los constructores de la sociedad a reflexionar sobre el Chile que queremos construir para el futuro. Para iniciar y promover este proceso de reflexión dieron a conocer el documento “En camino al Bicentenario”.


En un concurrido acto, en el Centro de Extensión de la Universidad Católica, y con la presencia de representantes de los más diversos sectores del quehacer nacional, al mediodía de este viernes 24 de septiembre, el Cardenal Arzobispo de Santiago y Presidente de la Conferencia Episcopal de Chile, monseñor Francisco Javier Errázuriz Ossa, dio a conocer el documento de trabajo de los obispos titulado “En Camino al Bicentenario”.

En su intervención, el Cardenal Francisco Javier Errázuriz destacó el interés de los obispos por promover una reflexión seria y profunda en todos los sectores de la sociedad sobre el país que deseamos construir para el futuro. “Pensamos que el Bicentenario de nuestra Independencia Nacional, puede ser ocasión de reencuentro con el ´Alma de Chile´, en palabras consagradas por el recordado Cardenal Raúl Silva Henríquez, y de proyección de la mirada hacia el futuro con la voluntad de refundar a Chile, a partir de la fecundidad de los valores esenciales que sustentan nuestra identidad nacional”, dijo Monseñor Errázuriz, citando el mencionado documento.

Construir un País más fraterno y desarrollado

Entre las autoridades presentes en el acto se encontraban, en representación del Presidente de la República, el Ministro Secretario General de Gobierno, Francisco Vidal; el Presidente de la Cámara de Diputados, Pablo Lorenzini; el Nuncio Apostólico, Monseñor Aldo Cavalli; los Obispos Auxiliares y Vicarios Episcopales de Santiago. También asistieron representantes de las Fuerzas Armadas y de Carabineros, del poder judicial; numerosos empresarios, dirigentes sindicales, educadores, intelectuales, artistas, comunicadores sociales, estudiantes y jóvenes.

Durante el acto expusieron, sobre el Chile que sueñan para el 2010, una pobladora y un empresario. “Como mujer, esposa y madre sueño con un Chile en que se respete la dignidad de todos sus habitantes, porque todos hemos sido creados a imagen y semejanza de Dios”, dijo Paulina Lizama, dirigente de la población Lo Sierra, en la comuna de Lo Espejo, quien formuló un emotivo llamado a construir un país más solidario y fraterno. En tanto, el empresario Juan Claro, Presidente de la Sociedad de Fomento Fabril y de la Confederación de la Producción y del Comercio, abogó por un país más desarrollado en lo social y en lo económico.

Al inicio del acto se presentó un video con opiniones de diversas personas sobre cómo sueñan Chile para el 2010. Los entrevistados, en general, manifestaron los deseos de superación de la pobreza, de una mejor educación para todos los niños y jóvenes, de mayor trabajo y mejores remuneraciones, de un logro pleno de la reconciliación nacional y de un trato más respetuoso entre las personas. Entre quienes manifestaron sus opiniones destacaban el Presidente del Senado, Hernán Larraín; el Ministro de Educación, Sergio Bitar, trabajadores, artistas y jóvenes.

Al término del acto, el Cardenal Errázuriz hizo entrega del documento a representantes de los diversos sectores que componen lo que la Iglesia denomina los constructores de la sociedad. Entre quienes lo recibieron se encontraban, además de las autoridades presentes, la historiadora Lucía Santa Cruz, el rector de la Universidad Católica, Pedro Rosso; el General de Ejército Juan Miguel Fuente Alba, el General de Carabineros René Moya, la periodista Pilar Bernstein, la dirigente sindical Juanita Rojas, el dirigente campesino Exequiel Mallea, el estudiante universitario Claudio González, y la familia Smith Benavente.

Estimular y enriquecer la reflexión

Los obispos plantean que lo que han entregado es un documento de trabajo que se propone para “estimular la reflexión y ayudar a los creyentes adultos, a quienes la Iglesia considera como instauradores del orden temporal, a sopesar sus responsabilidades”.

El presente documento se ofrece también “a otros hermanos y hermanas, cristianos y no cristianos, creyentes y no creyentes, con el fin de escucharlos, enriquecer nuestras reflexiones y llegar, eventualmente, a un documento más maduro y representativo”. Los obispos señalan que la Iglesia está convencida de la eficacia inigualable del diálogo, como método de discusión. Y mencionan dos acontecimientos que pueden inspirar el diálogo entre los chilenos: la canonización del Padre Alberto Hurtado y la campaña presidencial del 2005.

El documento de los obispos, dirigido a los constructores de la sociedad, consta de cuatro partes: el Bicentenario y Cambios Culturales; El Bicentenario y los Constructores de la Sociedad; Propuesta Metodológica; y Un Llamado Final para el Servicio del Bien Común. También se incluyen tres anexos que se refieren a Textos Magisteriales para Profundizar la Reflexión del Documento de Trabajo; Algunos textos del Padre Hurtado; y Metodología sugerida para encuentros de reflexión.

En la parte final de “En camino al Bicentenario” se señala que “construir la sociedad es tarea eminentemente humana. Los líderes sociales, los constructores de la sociedad, lo serán de verdad en la medida en que sean capaces de interpretar los dolores, las esperanzas y los anhelos de la gente, y ayudarnos a marchar juntos en la dirección correcta”.

“Quisiéramos hacer un llamado a todos los que tienen responsabilidad en la sociedad, entre quienes también nos incluimos, para que, poniendo el bien común por sobre toda otra consideración particular, hagamos nuestro aporte a un Chile que entre todos podemos construir. Dios nos hizo seres para vivir en sociedad y nos entregó la responsabilidad de construir sociedades humanas y humanizadoras”, expresan los obispos.

Intervención del Cardenal Francisco Javier Errázuriz

Más sobre “En Camino al Bicentenario”.

Fuente: DOP Santiago


Santiago, 24-09-2004