Emotiva despedida a Padre Alfredo Ruiz Tagle

Emotiva despedida a Padre Alfredo Ruiz Tagle

 
Martes 13 de Julio de 2004
“Su mensaje y obra, en favor de los niños más abandonados, tienen plena validez en nuestros días”, dijo el Cardenal Francisco Javier Errazuriz, luego de asistir a la Misa de Exequias de quien fuera el creador de la Fundación “Mi Casa”. La Eucaristía fue presidida por Monseñor Sergio Valech, Obispo Auxiliar Emérito de Santiago y actual Presidente de Mutual Pax.

En medio del cariño y afecto de más de medio centenar de niños de los Hogares de la Fundación “Mi Casa”, se ofició esta mañana la Misa en memoria del Padre Alfredo Ruiz Tagle Jiménez, a la que asistieron familiares y amigos de quien fuera el creador de esta gran obra de beneficiencia. La Eucaristía fue presidida por Monseñor Sergio Valech, Obispo Auxiliar Emérito de Santiago, y concelebrada por Monseñor Cristián Contreras Villarroel, Obispo Auxiliar de Santiago; y los sacerdotes Renato Poblete, Nicolás Vial, Miguel Ortega, Mario Garfias, entre otros. Al oficio religioso asistió el Cardenal Francisco Javier Errazuriz, quien rezó el responso final.

Obra extraordinaria

“Una de las formas cómo Jesucristo ha pasado por nuestra patria haciendo el bien., lo hizo en forma extraordinaria a través del Padre Hurtado y también lo hizo a través del Padre Alfredo Ruiz Tagle. Creo que su mensaje y su obra en favor de los niños abandonados tienen una validez extraordinaria hoy día. En la creación de la Fundación “Mi Casa” puso un empeño personal total. No es que sólo haya fundado una gran institución, sino que él, en primera persona, quiso entregar lo suyo por esto”, señaló el Cardenal Francisco Javier Errázuiz, al ser consultado por la prensa sobre el legado del Padre Alfredo Ruiz Tagle.

Ejemplo de generosidad

Por su parte, Monseñor Sergio Valech destacó en su homilía que él fue un ejemplo de entrega y servicio al prójimo, especialmente a los más desamparados. “Nuestro hermano Alfredo –dijo- buscó constantemente servir con mayor dedicación y entrega, olvidándose de sí mismo, a sus hermanos necesitados. En ese afán se unió al Padre Hurtado y se entregó por entero a buscar al niño abandonado y ofrecerle un hogar, y acompañarlo en su vida”.

“La Fundación “Mi Casa” –agregó Mons. Valech en su homilía- fue una semilla que sembró y que luego se extendió por diversos lugares de Chile. En ellos va desarrollando un trabajo muchas veces incomprendido, va formando generaciones de niños y jóvenes que hoy ya adultos agradecen esta labor silenciosa del Padre Alfredo Ruiz Tagle. La obra que él realizó, a la cual se entregó con todas sus fuerzas y que supo mantener en medio de las dificultades, debe servir para nosotros como un ejemplo para asumir también en nuestras vidas una actitud de generosidad y de búsqueda del hermano que sufre”.

Su vida

El Padre Alfredo Ruiz Tagle había nacido el 13 de septiembre de 1911. Estudió en el Instituto de Humanidades Luis Campino, y Derecho en la Pontificia Universidad Católica de Chile. Hizo sus estudios de Filosofía y Teología en el Seminario Pontificio Mayor de Santiago. Fue ordenado sacerdote el 21 de diciembre de 1935.

Durante sus primeros años de sacerdocio, se desempeñó como Vicario Cooperador en las parroquias de Puente Alto y de Santo Tomás de Aquino. Fue también profesor en el Instituto Luis Campino, siendo director espiritual en dicho establecimiento educacional.

Sus primeros pasos a favor de los niños de la calle y en riesgo social, los realizó en compañía del padre Alberto Hurtado, trabajando juntos en un Hogar para menores en la localidad de Colina. El 18 de agosto de 1947, fundó la Fundación “Mi Casa”, institución que se preocupó de atender a menores abandonados y en riesgo social.

El Padre Alfredo Ruiz Tagle falleció el domingo 11 de julio pasado, a las 17:00 horas, a la edad de 93 años. Se encontraba internado desde hace más de un año en la Residencia sacerdotal Santo Cura de Ars, casa de reposo especialmente para sacerdotes ancianos y/o enfermos que mantiene el Arzobispado de Santiago gracias a la colaboración y apoyo de la Fundación Las Rosas.

Santiago, 13 julio 2004
Santiago, 13-07-2004