Voluntarios de Trabajo y Misión País tras intensas semanas de trabajo: «No nos olvidemos de Santa Juana»

Voluntarios de Trabajo y Misión País tras intensas semanas de trabajo: «No nos olvidemos de Santa Juana»

Los jóvenes de Misión País y de Trabajo País fueron los primeros voluntarios que llegaron hasta la Parroquia Inmaculada Concepción de Santa Juana y luego de tres semanas de intensa labor, dos de ellos dan su testimonio y llaman a no olvidar a quienes lo han perdido todo.

 
Lunes 27 de Febrero de 2023
Los jóvenes de Misión País y de Trabajo País fueron los primeros voluntarios que llegaron hasta la Parroquia Inmaculada Concepción para ir en ayuda de los afectados por los incendios en Santa Juana.

No había pasado ni un día desde el inicio de los siniestros y ellos ya estaban en la comuna colaborando con la construcción de cortafuegos e incluso ayudando a evacuar a las familias.

Han sido tres semanas de trabajo intenso y el Padre Ricardo Valencia, Párroco de Santa Juana, manifestó su profundo agradecimiento a los voluntarios y dio a conocer el testimonio de dos de ellos a través de las redes sociales de la parroquia. Además, los llamó a que -ahora que viene marzo- recarguen “las pilas para que el semestre de estudios sea intenso y tengamos unos muy buenos profesionales católicos”.

Lisette Meriño, quien es voluntaria de Trabajo País Concepción, relató que cuando se enteró de los incendios sintió inmediatamente “un llamado a venir al tiro a ayudar, a apoyar. Yo creo firmemente que Dios nos da a todos capacidades y talentos y es nuestro deber entregarlos al servicio de la comunidad. Y este era un momento en el que se necesitaban muchas manos, que se siguen necesitando muchas manos, y era nuestro deber, yo sentía en mi corazón que tenía que venir a darlo todo”.

En ese contexto, sostuvo que han sido semanas agotadoras y explicó que la semana de misión que contempla el proyecto se prepara durante meses, pero en este caso, han tenido que planificar cada día el día siguiente, “lo cual ha sido un reto, pero mirando a la larga, yo creo que ni siquiera hemos dimensionado la cantidad de familias a las cuales hemos llegado”.

“No nos olvidemos de Santa Juana”

Luis Parra, quien es voluntario de Misión País Concepción, relató que “cuando supimos que se estaba quemando acá, la primera reacción fue venir a ayudar”. Si bien querían primero reunir cosas, tras “varios llamados con el Padre Ricardo y con las tías de la comunidad, preferimos venir y ser aporte en lo que fuera: haciendo cortafuegos, ayudando a la gente a evacuar, ayudando en los centros de acopio, ayudando en lo que hiciera falta”.

Durante estas tres semanas han colaborado en el albergue, también en el centro de acopio de la parroquia y en terreno, donde han realizado tareas de limpieza, han sacado escombros y también, han ayudado “a construir si es que ellos ya lo estaban haciendo”.

En ese contexto, Lisette destacó que “el hecho de que ya se están limpiando los terrenos ayuda mucho a la gente”, les da “un poquito más de paz” y precisó que “nosotros también conversamos mucho con las familias, somos católicos, tenemos también un interior misionero, así que hemos tratado de acompañar a la mayor cantidad de familias que podamos. Aparte de eso también vamos haciendo un catastro de las personas que necesitan ayuda y nosotros se la llevamos día a día”.

Son cerca de cuarenta jóvenes los que han estado colaborando y Lisette llamó a que ahora que empieza marzo “no nos olvidemos de Santa Juana ni de los lugares afectados por los incendios, porque claro la primera semana todos vinimos a ayudar, pero a las personas les va seguir faltando agua, les va seguir faltando un techo y los invito a que si quieren ayudar, vengan a Santa Juana, se metan a los caminos, no lleguen solamente a las casas más cercanas, vayan lo más lejos posible. Y no sólo dejen ayuda, conversen con la familia, vean cuáles en verdad son sus necesidades” e invitó a ponerse en el lugar de ellos y pensar “si a mi familia se le quemara todo ¿qué es lo que me gustaría recibir?”.


Avanzar en la reconstrucción

En ese sentido, enfatizó que ahora la gente necesita avanzar en la reconstrucción. “Muchos están empezando a levantar, nosotros igual hemos ayudado a levantar pequeñas chozas para que empiecen a vivir. Necesitan hacer sus pozos para ir al baño, necesitan estanques, necesitan mangueras, que se les han quemado todas”.

Lisette explicó que en el campo no es como en la ciudad, donde tú abres la llave y sale agua, sino que aquí “todos tienen sus punteras, tienen que tener agua en el estanque y de eso dependen mucho las mangueras, que es lo que todas las familias nos han pedido (…) es lo que se les ha quemado a todos”.

Asimismo, señaló que también necesitan un lugar donde guardar sus animales, necesitan fardos y donde guardarlos, ya que “algo que nos comentaban muchos es que se han quemado maquinarias y quienes van a reconstruir parte de Santa Juana son los animales, los que son sus animales de trabajo”.

También hizo un llamado a entregarles acompañamiento a las familias, llamarlos, saber qué necesitan, “porque son personas que han pasado por un momento terrible (…) y necesitan un acompañamiento espiritual, social y todo lo que eso conlleva”.

Por su parte, Luis manifestó que los primeros días “la sensación general era de querer hacer algo ahora ya, organizar cosas, moverse rápido, ahora están calmándose las aguas y se está entrando a otra etapa”.

“Las personas están yendo a sus terrenos todos los días, están empezando a construir, están volviendo a encender la llamita de la esperanza, pero igualmente es una llamita que está recién partiendo, es muy débil y necesita mucho apoyo, porque hay personas de ochenta años, setenta años, que tienen que volver a partir de cero y hoy en día están durmiendo en una carpa o en un galpón, entonces es muy complicado, pero ya se está empezando a reconstruir. Esperemos que la ayuda llegue a ellos”, expresó.

Finalmente, Luis agradeció a las familias de Santa Juana y destacó que “cuando nosotros llegábamos a los terrenos en los cuales las casas estaban destruidas, las personas siempre nos recibían con un abrazo y una sonrisa muy bonita. La verdad es que si no hubiera sido por el entorno en el que estaban no nos hubiéramos dado cuenta de que habían pasado por una pena tan grande. Así que agradecerles, darles un abrazo grande en este momento y pedirles que a pesar de que cueste un montón traten de poder seguir caminando y volviendo a construir esta comuna”.

Fuente: Comunicaciones Concepción
Concepción, 27-02-2023