Peregrinos provenientes de los alrededores, del campo y de las ciudades cercanas, se congregan cada a año a dar gracias, pagar mandas, rezar y celebrar la fe en este paraje rodeado del río y los verdes campos.

El padre Teóforo de Jeu, sacerdote capuchino de 94 años, acompañó la primera Eucaristía realizada en la capilla, invitando a los feligreses a no descuidar la fe. Hizo recuerdo de su llegada a Chile en los años 60, tiempos en los que la pobreza material en contraposición de la riqueza de la fe de las personas lo impactaron. Hoy es lo contrario cada vez más comodidades y menos fe. Muchos de los asistentes que conocieron al padre Teóforo desde niños, piden la bendición de este sacerdote anciano quien con mucha disposición se toma el tiempo de bendecir y saludar a cada uno. También se dedica a confesar a los peregrinos.

La segunda Eucaristía fue presidida por monseñor Santiago Silva Retamales, acompañado del padre Cesar Márquez, decano del decanato San José , el padre Miguel Ángel Concha SS.CC. y el diácono Nazario Martínez. La celebración fue realizada en la puerta de la capilla, al aire libre, por el número de participantes; para luego ir en procesión con las imágenes de la Virgen y San José rezando y cantando, imágenes que al regresar de la procesión son ingresadas juntas al templo.

Sorprende el número de niños que junto a sus familias llegan a continuar la tradición heredada por sus padres y abuelos de encender las velas y rezar junto a ambas imágenes religiosas.

La Comunidad de Misión Católica de Trumao agradece a los peregrinos que los han visitados, dejando abierta la invitación para el próximo año a descubrir esta fiesta a quienes visitan los parajes del Sur durante las vacaciones.

Fuente: Obispado de Valdivia
Valdivia, 25-01-2023