El encuentro inició con un breve momento orante en la capilla de la sede de la CECh, el que prosiguió con la bienvenida de Valeria López Mancini, Secretaria General Adjunta del Episcopado, quien valoró que las personas que trabajan por las causas en Chile, puedan conocerse y desde ahí, apoyarse mutuamente en lo que sea posible, desde la hermandad y el sentido de comunidad que debe tener la misión de promover la santidad en la Iglesia.

Sobre el apoyo a esta iniciativa, Valeria López Mancini, señala que “con alegría acogemos y abrimos las puertas de la Conferencia Episcopal a estos hermanos y hermanas que realizan un trabajo silencioso y paciente, a través del cual resuena el llamado a la santidad que el Señor hace a cada uno de nosotros, y - citando al papa Francisco en la Exhortación apostólica Gaudete et exsultate – “la santidad es el rostro más bello de la Iglesia”.

Luego de una presentación de las causas a las que representaban, los asistentes pudieron conocer algunos detalles del libro de la Revista Humanitas de la Pontificia Universidad Católica de Chile: “Huellas de la Santidad en Chile” y revisaron tres videos motivacionales breves, momento que fue conducido por el joven Felipe Torres, quien ha coordinado el encuentro de las causas, motivado por la colaboración que prestó por algún tiempo al difunto padre Jaime Correa sj, reconocido promotor la causa de los santos en el país.

Al respecto, Felipe Torres expresó su emoción y satisfacción por poder ayudar a que este encuentro se concretara, señalando que la causa de los santos es un camino “que sí o sí la Iglesia en Chile tiene que considerar como central de cualquier pastoral”, agregando que en 2023 a cinco años de Gaudete et exsultate y los diez años del pontificado del papa Francisco, le encantaría “que además de las causas de sacerdotes, obispos y religiosas, también se visibilicen a laicos y laicas contemporáneos quienes también están llamados a la santidad”.

Posteriormente, fray Juan Rovegno, vice postulador general de la Causa de Fray Andresito, realizó la presentación titulada “¿Para qué promover la santidad?”, entregando argumentos teológicos y pastorales, entre los que destacan la santidad como propia del ser de Dios y el que todo ser humano está llamado a la santidad en Cristo. Sobre la reunión, el religioso franciscano manifestó que “ha sido muy significativo, como lo dije en el encuentro, por ser algo que surge del laicado. Creo que eso es sorprendente, que el Espíritu Santo anima eso, y además que este equipo de laicos esté coordinando, con una perseverancia extraordinaria, por Felipe que es un joven. Eso me ha calado muy hondo. Es un signo además de sinodalidad, una manifestación providente que algo quiere Dios hoy y que también ilumina a nuestros pastores, a la Conferencia Episcopal, de que hay que poner este trasfondo a lo que podamos hacer nosotros”.

Luego se dio un espacio de diálogo conducido por el claretiano seglar, Alfredo Barahona, momento donde destacaron reflexiones sobre que en estos tiempos la santidad es una “buena noticia” a proclamar, con un lenguaje más cercano y que interpele como estilo de vida al que todas las personas están llamadas. De ese espacio surgieron interrogantes y propuestas para seguir colaborando conjuntamente entre las diversas causas.

Sobre ello, Loreto Fernández, del equipo de la Causa de Beatificación de la Sierva de Dios Bernarda Morin y que también ha colaborado en la animación y coordinación del encuentro manifestó que se ha ido concretando el objetivo de “consolidar un espacio donde pudiésemos tener mayor claridad de quienes éramos y conocernos para continuar en esta lógica de apoyarnos mutuamente y de ser un signo concreto de sinodalidad al interior de la Iglesia”, añadiendo que “también queremos de alguna manera poner de relieve que el trabajo que estamos haciendo en función de las determinadas causas, no es solo para promover la figura en concreto que nos convoca, sino que para promover la santidad como vocación universal que la Iglesia desde el Evangelio nos invita a vivir en los contextos que nos toca estar”. Sobre la proyección de esta orgánica, Loreto Fernández explica que entre algunas de las propuestas está la idea que el grupo que se está gestando se pudiese llamar “Jaime Correa en honor a este padre y hermano jesuita, qué tanto hizo por promover el tema de la santidad en Chile en distintas causas que hoy están en proceso”, además de trabajar en torno a la exhortación Gaudete et exsultate con la convicción que es un texto “muy valioso, muy pastoral y directo que podría ser un lugar por dónde podríamos empezar a transitar, bajo la consigna de qué podemos resaltar de nuestros santos y de nuestras santas para motivar a la Iglesia y a la sociedad de hoy, y también por cierto, cómo dar respuesta a una Iglesia herida saliendo más allá, como nos recuerda el Papa Francisco”.

En el encuentro participaron representantes de las causas de la beata Laura Vicuña; los venerables: fray Andresito, del padre Mariano Avellana y monseñor Francisco Valdés; de los siervos de Dios: padre Fortunato Berríos, la madre Bernarda Morin, monseñor Adolfo Rodríguez, el obispo Enrique Alvear, el padre Esteban Gumucio, Antonio Rendic, Josefa Fernández; y de fray Crisógono Sierra y Velásquez, conocido como el “padre Negro” y sobre el cual se está estudiando iniciar un proceso.

Fuente: Comunicaciones CECh
CECh, 25-11-2022