Obispo Gonzalo Bravo: «Que el narcotráfico no le gane a la esperanza, no les gane la alegría de vivir»

Obispo Gonzalo Bravo: «Que el narcotráfico no le gane a la esperanza, no les gane la alegría de vivir»

El narcotráfico es una realidad que ha ido creciendo en nuestras comunidades es por eso que el p. Gonzalo Bravo Álvarez, obispo de San Felipe, durante la misa de este 5 de diciembre, presidida en la comunidad de Chincolco, señaló que: “Hay un problema que está azotando vuestra comunidad, que es el tema de la droga, el narcotráfico, el cultivo y las amenazas que algunos de ustedes están sufriendo”.

 
Lunes 06 de Diciembre de 2021
“Que el narcotráfico no le gane a la esperanza, no les gane la alegría de vivir, no nos mate la ilusión del amor y que el temor de la violencia nunca tenga carta ciudadana en nuestra comunidad”, destacó el pastor en su mensaje.

Este segundo Domingo de Adviento las lecturas nos invitan a mirar hacia el futuro. Un futuro en donde debemos estar atentos a los problemas que enfrentan muchas de nuestras comunidades como la desigualdad, la violencia, el comercio de armas y el narcotráfico.

Hoy el evangelio nos recuerda la figura de Juan el bautista, la voz que grita en el desierto anunciando la llegada de Jesús. Voz que anuncia la llegada del Reino de Dios que es vida, vida que está permanentemente tratando de brotar y germinar para transformar el mundo. Continúo diciendo el p. Gonzalo: “Que el Señor nos ayude a todos y todas, no solamente a ser valientes sino a ser prudentes y sabios para luchar contra las tentaciones de ostentación”

Hizo también una invitación a todas las personas que hoy se encuentran sumergidas en la droga y en el narcotráfico: “Miren a sus hijos pequeños, miren los ojos de sus madres que quizás está enferma y anciana, miren los ojos de quienes los acompañan díganme si no quieren tener un mundo mejor”

Hoy debemos ser esa voz que grita en el desierto y que es capaz de anunciar el Reino, un reino que se construye con el respeto a la vida, a la paz, al trabajo honrado y honesto y que rechaza la violencia, el narcotráfico, las amenazas y atentados contra la paz y la tranquilidad de la comunidad.

Fuente: Obispado de San Felipe

San Felipe, 06-12-2021