En ese marco, Monseñor Fernando Chomali figura como una de las fuentes del artículo señalando que «si bien hay situaciones en al final de la vida de una persona que son dolorosas, dramáticas y de mucho sufrimiento, nada justifica causarle la muerte a una persona».

Ante lo anterior, agregó: “Las personas enfermas requieren cuidados médicos, atención humana, sicológica y espiritual. El talante de una sociedad se mide en la capacidad que tiene de hacerse cargo de los más débiles. La ley que permite la eutanasia es una solución práctica en el contexto de una sociedad utilitarista que deja solos a los más débiles. Con esta ley la cultura del hacer y del tener prevalece por sobre la cultura del ser y nos pone en guardia respecto de nuestro propio futuro en los momentos que más necesitamos afecto, compañía y cuidados paliativos”.

Asimismo, en su opinión, explicó que si la iniciativa se termina por aprobar, iría en contra del actuar médico: “Mientras los equipos de salud han llegado al heroísmo para salvar vidas a raíz de la pandemia, arriesgando su vida y las de sus familias, algunos legisladores promueven este proyecto de ley. Algo muy difícil de comprender”, cerró el Arzobispo de Concepción.

Fuente: Comunicaciones Concepción
Concepción, 22-04-2021