La costumbre es que el primer domingo de diciembre en la Catedral Metropolitana, se celebra el comienzo del período de Adviento. Se da inicio al año litúrgico cristiano, que comprende las cuatro semanas antes de Navidad. La ceremonia está marcada por la bendición a las futuras mamás y sus familias, que con fe y esperanza se preparan para la llegada de sus hijos.

"El Adviento es el tiempo que tiene la Iglesia para esperar la llegada del Señor, la llegada de la vida, y eso se parece, digamos, a las embarazadas en su última etapa cuando ya están cercanas a la llegada de su adviento. El Adviento es cercano, y en este tiempo que estamos próximos al nacimiento de Jesús, es que también nuestra comunidad focaliza su acción y reconoce en ellas este Adviento, en este caso de su hijo o hija, que representan con la llegada del Señor a esta nueva vida" comentó José Manuel Borgoño, Delegado Episcopal para la Familia quienes promueven esta actividad.

El deán de la Catedral, Juan de la Cruz, fue el encargado de presidir la misa que dio inicio a este período de Adviento y destacó en su homilía la importancia de vivir la Navidad con humildad: "El mensaje es la universalidad, todos los pueblos de la Tierra, creyentes y no creyentes, el pueblo de Israel y otros pueblos son llamados a vivir esta experiencia, el Señor ha cumplido su palabra, el Señor ha nacido en medio de nosotros. El nacimiento de Jesucristo es de una sencillez, de una vida austera, de una pobreza casi al límite, pero de una paz profunda. Una verdadera felicidad, don de Dios, donde no tiene nada que ver el poder económico ni la situación económica de ellos ni el dinero, ni la plata, ni la riqueza, simplemente es una paz interior, un regalo profundo al ser invitados a experimentar esta alegría: ser los primeros en recibir a Jesús, el Mesías. No nos olvidemos que esas son las características de la Navidad".

Frente a la situación que vive nuestro país, el deán aseguró que, aunque estas semanas han sido dolorosas y tristes para Chile, el verdadero significado de la Navidad estará presente en las familias: "Hoy día lo que nos interesa es que esta Navidad va a ser muy distinta a las anteriores, será muy íntima, muy de la familia, de lo que vamos a compartir. Seremos nosotros, nos miraremos las caras y frente a una velita de Navidad o un pequeño pesebre igualmente le daremos gracias al Señor porque la Navidad es Jesús con nosotros".

Yeri Valencia espera la pronta llegada de su hijo y siente que la bendición que recibió hoy en la Catedral de Santiago fue un signo de esperanza y compañía que no esperaba de la Iglesia: "Fue una experiencia maravillosa, porque de alguna manera también sientes que no solamente está tu pareja y tu familia apoyándote, sino que también hay una Iglesia que está contigo, entonces igual se siente muy bien. Estoy feliz, creo que mi hijo es mi milagro, lo veo así. Además, este tiempo de adviento es un momento para nosotros, para pedirle a Dios, encomendarse a él y que frente a todas las adversidades que hoy vivimos es un momento de espacio familiar".

Fuente: Comunicaciones Santiago
Santiago, 04-12-2019