La tradicional eucaristía que contó con la presencia de autoridades se realizó a eso de las 10:30 horas en las afueras del templo de San Lorenzo. Donde se rezó por cada uno de las autoridades, bailes, peregrinos y toda nuestra iglesia.

El mensaje fue entregado por el Sacerdote provincial de la congregación Redentorista y ex rector del templo de Tarapacá, José Rodríguez, en donde agradeció la participación de todos los bailes, bandas, comisiones y peregrinos en esta nueva celebración del 10 de agosto. También, y continuando la misma línea, recordó que una vez que se retorne a las actividades cotidianas, es ahí donde debemos practicar nuestra fe, y comenzar a vivir con alegría la promesa de la palabra que Dios nos ha entregado. Para que así el próximo año podamos decirle a nuestro amigo Lorenzo, gracias por tu infinita intercesión.

La ceremonia estuvo marcada también por diferentes niños que al momento de la ofrenda, llevaron banderas de distintos países hermanos que simbolizaban la misión entregada por el Papa Francisco de la unión, el amor y la integración que debemos tener hacía el prójimo.

Al finalizar la eucaristía se desarrolló la tradicional entrega de naranjas hacía todos los presentes. Fruto propio de la zona, que se entrega en agradecimiento por la cosecha permitida en el año.

Procesión de las imágenes

A eso de las 15:30 horas, se dio inicio a la solemne procesión de las imágenes de Cristo Resucitado, la Virgen de la Candelaria, y San Lorenzo mártir. Los cuales recorrieron el pueblo escoltados por diferentes bailes que danzaban en compañía de los peregrinos.

En una estación de las cuales pasean a las imágenes, se hizo una pequeña pausa, donde quienes cargan a San Lorenzo fueron sólo mujeres pertenecientes a la sociedad de cargadores y portadores del Diácono Lorenzo.

La procesión duró un poco más de 7 horas, donde los diferentes peregrinos se fueron aglomerando en las afueras del templo para esperar la llegada de las imágenes.

Unos de los momentos más emblemáticos que se vive previo a finalizar la procesión, es la llegada de todas las bandas que participaron en la fiesta, donde una vez que la imagen de Lorenzo llega a la esquina del templo, todos se unen para tocar una misma canción. Bombos, cajas, trompetas, trombones y platillos, formaron parte de esta única entonación para despedir al Santo.

A eso de las 11:00 de la noche, se hacía ingreso de la imagen de San Lorenzo al templo de Tarapacá, donde se despedía del pueblo con fuegos artificiales, cantos, y pañuelos al viento, hasta el próximo 10 de agosto.

Fuente: Comunicaciones Iquique
Iquique, 12-08-2019